Ante los resultados que se obtuvieron en estas elecciones, Marcela Mercado Luna indicó “nosotros desde el Movimiento Nacional Alfonsinista que es un movimiento al margen del partido porque consideramos que la convención de Gualeguaychu traicionó todos los principios que venía sosteniendo la Unión Cívica Radical”.
“Lo que importa es el proyecto y de pronto nos damos que un gobierno como este que se llamó proyecto nacional y popular, ha podido hacer realidad muchas de las cosas que forman parte de la ideología de la UCR y vemos que el partido se aleja cada vez más porque ha priorizado el rol opositor a buscar las coincidencias”, apuntó.
Ante esta realidad que está sumergido los ciudadanos argentinos, Mercado Luna señaló “el sistema electoral nos ha puesto en una opción clara que es un modelo de país u otro modelo, a lo mejor Scioli no es el mejor candidato pero representa un modelo que hizo grandes conquistas para los ciudadanos argentinos y eso no lo podemos olvidar ni mucho menos perder”.
“Macri en lo que a nosotros respecta es la vuelta a los 90, es volver al pasado, porque muchos se lamentan del 2001 y eso surgió de una política Neoliberal que se dedicó a rifar todos los recursos y riquezas del país y este gobierno las fue recuperando entonces no podemos perder eso”, comparó.
Haciendo énfasis sobre su mirada hacia el rol que está cumpliendo el Radicalismo en la actualidad, Marcela Mercado Luna manifestó “yo no sé qué puede pasar, no me quiero imaginar, yo hace bastante que me aleje del radicalismo cuando vi que se alejaban de los principios, se quedaron en una estructura vacía”.
“El radicalismo entregó el Partido a Macri, el radicalismo traidor le abrió las puertas de par en par”, sentenció.
Consultada acerca de si se puede dar que una parte del Radicalismo apoye al peronismo, a lo que respondió “el Radicalismo apoyando al Peronismo no existe, pero aquí no estamos hablando de Peronismo, aquí hay un construcción transversal donde participa gente de la izquierda, de otros partidos minoritarios”.
“Entonces el Frente Para la Victoria es una cosa y el PJ es otra, entonces ahora no podemos hablar de partidos porque hoy están muy devaluados, ahora hay que hablar de ideales”, finalizó.
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«Votar a Macri es volver a los ’90»
ESTO ES LO Q DICEN LOS K/CHORROS Y ASI TRATAR DE MANIPULAR A LAS PERSONAS
Es el eslogan de los kirchneristas para intentar convencer al pueblo de votar por Scioli. Triste y mediocre herramienta de manipulación, evidencia de desesperación y total ausencia de argumentos propios para sustentarse.
Estar, estuvieron todos con Menem. Scioli, Massa, Macri, Nestor, Cristina… Lo que me parece importante destacar no es quién estuvo o quién no estuvo, porque entonces no queda ni uno de pie.
Lo que me parece importante destacar es quién se llena la boca hablando de lo mal que estábamos con Menem, pero le permitió conservar poder político e ingresos económicos a costa del Estado (Menem pasó a ocupar una banca en el Senado integrando las filas del Kirchnerismo).
Acá el asunto no es la comparación en sí. Acá el asunto es la contradicción, la memoria selectiva, el doble discurso, la hipocresía que caracteriza al Peronismo.
Yo estoy más que repodrido del Peronismo (o de los que se dicen justicialistas, porque el Peronismo murió hace rato); de salir con miedo de noche (y de día); de que el sueldo no alcance ni para llegar a fin de mes (y cada vez rinde menos); de que tengan más Derechos Humanos los delincuentes que las víctimas; de que con el billete de mayor denominación apenas lleguen a comprarse dos kilos de cebolla; de que los hospitales y colegios públicos no tengan insumos o directamente se caigan a pedazos; de que la droga y el narcotráfico consuman violentamente a los jóvenes (ya sea por consumo o por la inseguridad aparejada a las redes de distribución); de que la palabra «oficial» sea sinónimo de «falso» (si le creés a los números del Indec, sos el salame más grande del mundo); de que los chicos salgan del colegio cada vez más ignorantes; de que el partido empoderado separe a los argentinos en «nosotros y ellos» (y peor aún, en «seguidores y enemigos»); de que se llenen la boca gritando «fuera buitres», «opositores vendepatria» y «nacional y popular», mientras se llenan de guita haciendo negocios para que Chevron, Barrick Gold y Monsanto envenen nuestra agua, nuestros suelos, y nuestro aire; de que te verseen de que si te matás laburando podés comprar tu propio terreno, mientras en la Patagonia los aliados del Kirchnerismo compran tierras por literalmente $2,50; de que los corruptos, mafiosos e hijos de puta que nos gobiernan encuentren la forma de siempre echarle la culpa a alguien más de lo que sea, en vez de tener las pelotas de hacerse cargo; de que nos gobiernen cobardes y mediocres de doble discurso y reprochable moral; de los fanáticos de la Reina Batata y el Rey Tuerto (porque en tierra de ciegos, el tuerto es rey; y no hay peor ciego que el que no quiere ver, y los kirchneristas hace rato que se arrancaron voluntariamente los ojos); del cinismo; de la obsecuencia; de la demagogia; del clientelismo; del populismo barato; del relato; y de tantas otras cosas que vengo viendo hace años en la calle (no en TN, no en el programa de Lanata, no en la primera plana de Clarín; en la calle), y que es imposible que no te indignen, a menos que tengas la cabeza totalmente lavada por este modelo inhumano.
Ya van demasiados años bajo el yugo de este gobierno mafioso. Como dijo el genial doctor Abel Albino, director de la Fundación Conin, «A los políticos hay que cambiarlos como a los pañales, con la misma frecuencia, y por los mismos motivos».
Por todo eso, no votaría al Kirchnerismo ni aunque me paguen, y ni mamado y drogado lo voto a Scioli.
Esto NO ES LO QUE QUIERO PARA EL FUTURO EN QUE CREZCA MI HIJO.
Ya nos sacamos de encima al hijo de remil putas de Anibaúl «la morsa» Fernández, ahora nos vamos a sacar de encima al inútil e incompetente de Daniel «el camaleón manco» Scioli.
Aunque no es el candidato de mi elección, ni el que me representa, el 22 de noviembre yo boto a la basura al Kirchnerismo, y voto a Mauricio Macri para Presidente de la República Argentina.
Los radicales perdieron el rumbo hace rato desde que de la Rua los quemó. No por es la convención esa de la que habla Marcela, esto viene de mucho antes. Alfonsín fue algo distinto, el radicalismo es intrinsecamente de derecha y la mejor prueba la tenemos hoy que va con macri. Caen caretas