Ayer fue Eugenio Zaffaroni quien adelantó que el vencimiento o no del plazo para presentar un plan de adecuación puede ser objeto de un nuevo pleito, por lo que prefirió no expedirse al respecto. Esta mañana, Lorenzetti fue más allá y aclaró: «Esto no termina acá».
«El problema se genera con la aplicación. Nosotros resolvemos fallos con respecto a las pruebas que hay en el expediente. Hay muchas cosas que se verán más adelante. Cada parte tiene derecho a hacer valer lo que considera su razón. En este caso Clarín o cualquier otro medio», explicó Lorenzetti.
Y ahondó: «En este caso, al momento de dictar sentencia, no está probado que haya una afectación de la libertad de expresión; más adelante, si la ley se aplica y surgiera una prueba clara, se verá. En abstracto no podemos decir nada». «Tenemos que ser mesurados y no adelantar opinión», concluyó al respecto.
Por otra parte, Lorenzetti descartó de plano las versiones que indican que habría fallado en favor de la constitucionalidad de la normativa porque lo amenazaron con algún tipo de fotos de su familia: «Yo no vi ninguna foto, hemos sacado todo tipo de sentencias. Si usted se fija en las sentencias de los dos años, en realidad es el Gobierno el que más se ha quejado». «No sé con qué nos puede presionar. La reforma judicial fue una sentencia muy fuerte», ejemplificó.
«Sobre el tema de la AFIP, nosotros hicimos ese planteo y la AFIP nunca ha determinado nada. Mi patrimonio está claro. Hace treinta años que estoy inscripto en impuestos. Si nos hubiese apretado la AFIP, no hubiésemos sacado esa sentencia», dijo respecto a las sospechas de que era presionado por la agencia recaudadora.
«Obviamente que son fallos polémicos. La crítica es buena, pero defendamos la institucionalidad, no pongamos en duda a los emisores de las opiniones, hay que dar tranquilidad. Bajar el tono. Cada parte tiene sus derechos, sus abogados. Para la Corte este es un caso y nosotros lo hemos resuelto», concluyó.
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