Redacción de RiojaLibre
Cuando un Gobernante tiene alta imágen negativa, y las urnas le dan la espalda; los ‘primeros en caer’ son los de Comunicación. Es a los consultores y los responsables de la Comunicación Política a los que se los responsabiliza. Cuando la situación es la inversa, como pasa en La Rioja, también debe darse la misma lógica.
Ricardo Quintela termina el año de manera inmejorable. Su apabullante triunfo en las urnas, más su altísima imagen positiva, no solo lo consolidan como amo y señor de la política riojana, sino que lo catapultan en la escena nacional. Una de las responsables de esa coyuntura tiene nombre y apellido: Luz Santángelo Carrizo.
Cuando se definió ‘enfrentar’ a Fénix, o mejor dicho ‘no dejarse extorsionar ni política ni comunicacionalmente’ por el Medio más grande de la Provincia’, muchos apuntaron a Santángelo y dudaron de su ‘capacidad’ para afrontar semejante desafío. Incluso, a algunos se escuchó decir ‘le quedó grande el sillón’.
Con el Diario del Lunes, debe aseverarse que el sillón le quedó chico. Es que la batalla comunicacional con el medio opositor se ganó por goleada, y lejos de ‘restar’ votos, sumó. La Rioja es el único distrito del País donde el Frente de Todos logró sacar más votos que en 2019, aún siendo esta una elección legislativa, de medio término.
En lo político, la jerarquía de Santángelo creció con el pasar de los meses. Hoy, se consolidó como un pilar clave del oficialismo, tanto en el ámbito institucional como en lo político. La ‘Pequeña Gigante’ fue vital para lograr la Unidad del PJ en Capital, logrando ‘meter’ en el tercer lugar de la lista a una ‘compañera’ y militante de su espacio.
En los resultados y definiciones de cargos más importantes que logró el oficialismo, Santángelo tiene sobradas razones y motivos para celebrar. Tanto el género femenino, como los jóvenes profesionales encuentran en Luz Santángelo a un referente en quien encuentran contención y -sobre todo- respaldo e impuslo para crecer políticamente.
