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Se llama Magdalena Bravi, le dicen Magui. Tiene 29 años y es bailarina clásica. Pero trabajó como azafata de avión de una aerolínea chilena antes de anotarse en el casting del Soñando por bailar, de Ideas del Sur. Y apenas apareció en el programa de Marcelo Tinelli cosechó un tendal de fanáticas que son de las más fieles e incondicionales de la farándula: Las Bravistas.
Durante muchos años Magui estuvo de novia con un joven desconocido. Y tras romper con él, ya nunca se le conoció una pareja. Sí un affaire con Ricardo El Chino Darín, y ahora, la versión que la vincula con Adrián Suar.
Y una buena ocasión, al fin, para apreciar toda su belleza, que hace arder las redes. Alcanza con ver para creer…
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