La situación del transporte urbano de pasajeros puede derivar en un verdadero escándalo judicial, en caso de comprobarse una estafa en el que estaría inmersa la empresa San Francisco con la complicidad de autoridades municipales. Se recibieron casi 60 millones este año en subsidios, por una cantidad de colectivos que no está en circulación.
Los ediles capitalinos tienen en su poder una serie de documentos que ya pusieron a disposición de la Justicia, para que se investigue el destino del subsidio al gasoil que envía la Nación y que significan 59 millones en lo que va del año.
Lo más llamativo es que ese monto se destina para el financiar el funcionamiento de más de 70 colectivos declarados por la empresa y avalados por las autoridades del Ejecutivo municipal, pero se habría constatado que sólo circulan 50. Esto deja un margen de al menos 20 unidades por las que se cobra y no prestan servicio.
La incongruencia significan muchos millones de pesos y lo peor es que de manera indefectible están involucrados funcionarios de Servicios Públicos de la comuna que conduce Alberto Paredes Urquiza, porque deben avalar con su firma el pedido del subsidio a la Nación. E incluso, la firma del intendente debe estar en las planillas como aval al pedido de los empresarios sanjuaninos propietarios de San Francisco.
Por todo esto, la Justicia está analizando todos los detalles y podría tomar fuertes represalias contra la empresa como a los responsables del municipio capitalino.
Nueva empresa
De la misma manera, la continuidad de San Francisco pende de un hilo, porque ya se analiza la posibilidad de contar con una nueva empresa, que tendría las características de una SAPEM que llevaría el nombre Rioja Bus, cuyas unidades podrían estar en los próximos 30 días en la provincia.
Fuente: Info Radio
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