Desde que Luis Beder Herrera anunció la reestatización del Nuevo Banco de La Rioja, el polémico dirigente José Siman defendió a ultranza cada palabra pronunciada por el Gobernador, auto proclamándose como el vocero de Beder.
“Fui el primero y único en propiciar esta medida que ahora resolvió adoptar Beder Herrera, entendiendo que reclamamos el Banco Rioja para que se convierta en una herramienta de crédito al servicio del sector productivo riojano”, afirmó horas después de que se conociera la iniciativa.
“Lo que falta es crédito a todos los sectores”, manifestó Simán y agregó “debe haber tasas de interés blandas, con acceso incluso para los empleados públicos de la provincia”. José Simán propuso como primer medida a tomar que “no se les cobre la cuota de préstamos por un año” a los empleados estatales y además pidió que “paguen intereses de acuerdo a los sueldos de las provincia, si los sueldos son bajos los intereses también”. Al respecto, algunos bederistas agregan que «no sorprende, porque no sería la primera vez que Siman no pague lo pautado».
“Vengo pidiendo hace un año que a los empleados se los deje descansar un poco. No se va fundir el banco, es muy fácil dar una moratoria y que durante un año no se le descuente la cuota” afirmó Siman. Recordó además que “una de las principales medias que tiene que adoptar el banco con sus nuevas autoridades debe ser la refinanciación de la deuda que mantienen los empleados públicos con la entidad crediticia”. Estimó que en una eventual refinanciación “si no se les cobra la cuota por crédito durante un año, también será una suerte de aumento a los agentes públicos”.
Todo este ‘chupamedismo’ de Siman con los intereses del Gobernador tendría su premio: Beder Herrera lo designaría en el nuevo directorio del Banco Rioja. ¿Se saldrá con la suya Siman?
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