Redacción de RiojaLibre
‘Hay que poner plata en el bolsillo de la gente’. Esa frase la hemos escuchado mucho en La Rioja. Desde que asumió la Gobernación, Ricardo Quintela la repite cada vez que anuncia o presenta una medida económica que tiene como fin ayudar a las clases más necesitadas.
Algunos le llaman ‘asistencialismo’ o ‘dadivas’ en tiempos electorales, pero el máximo mandatario riojano ha explicado hasta el hartazgo que el dinero que el Estado ‘invierte’ en los ciudadanos más vulnerables no va a parar abajo del colchón, sino que inmediatamente es ‘reinvertido’ en el circuito económico.
Consecuentemente, la asistencia del Estado a las clases más vulnerables no solo beneficia al ciudadano que se ‘asiste’, sino al Comercio en el que este ciudadano gasta la plata recibida. La asistencia del Estado es uno de los motores de la reactivación económica.
La asistencia y acompañamiento del Gobierno en el Parque Industrial provocó 1.000 puestos laborales nuevos, más otros mil que se generaron con el empleo Joven. El Estado debe estar presente para reactivar la Economía.
Así lo entendió y agradeció el riojano a la hora de ir a votar en las PASO, dándole al oficialismo una victoria por más de 30 puntos porcentuales de ventaja sobre la oposición.
En esa secuencia debe entenderse por qué Nación buscó en Ricardo Quitela el modelo a seguir para revertir los resultados electorales en el País. Esta tarde, el Presidente relanzará su Gobierno con una batería de medidas económicas tras la dura derrota electoral en las PASO.
Según confirmaron fuentes oficiales, el mandatario anunciará una suba del Salario Mínimo, Vital y Móvil (SMVM) entorno al 10%; el pago de un bono por única vez destinado a jubilados y pensionados que cobren hasta dos haberes mínimos y oficializaría el esperado cuarto Ingreso Familiar de Emergencia (IFE 4) para un sector bien reducido de la economía.
Así, serán más de 7 millones de jubilados y pensionados los que recibirán este bono, por única vez, que sería de 6 mil pesos. Alcanzará a quienes tienen ingresos inferiores a dos haberes mínimos, es decir, quienes ganen menos de 51.844 mil pesos.
En tanto, el aumento del 10% en el SMVM se sumará al 35% que ya avanzó en lo que va del año ese salario de referencia y llevará el aumento global para este año al 45%. La suba del haber estaba prevista para el 30 de septiembre, día que se volvería a juntar el Consejo del Salario Mínimo.
«Será un IFE bien acotado y pensado para los sectores más postergados y más afectados por la inflación, la falta de empleo y la pobreza», explicaron.
Esta batería de medidas busca anticiparse al dato de pobreza en el primer semestre del año que dará a conocer el INDEC el próximo 30 de septiembre y que todas las proyecciones ya anticipan una suba con respecto al semestre anterior así como en la comparación interanual y por el cual entre el 42% y el 43,5% de los argentinos estaría alcanzado por la pobreza.
Lo viene haciendo Quintela desde hace un año y medio, y ahora lo hará el Presidente con más tenacidad: tener un oído en el pueblo y meter plata en el bolsillo de la gente.
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