La actividad estuvo centralizada en la localidad de Chepes donde se realizó una reunión de trabajo en el Municipio. Allí se llevaron ayudas y soluciones a demandas requeridas por sus autoridades previo relevamiento por parte de un equipo de trabajadoras sociales, mediante el cual se detectaron las necesidades más urgentes y se plantearon posibles soluciones, elaborando un trabajo en conjunto para llegar a cada sector que lo necesite.
En ese marco se destacó la gestión y entrega de parte de las autoridades ministeriales de una silla de ruedas de alta complejidad.
«De la periferia al centro»
Al respecto, el ministro de Desarrollo Social Juan Carlos Santander indicó que «no es la primera vez que vengo a Chepes, vine antes como médico y siempre es lindo volver”.
Seguidamente expresó su agradecimiento a las autoridades comunales, “por ser un municipio presente, por estar con cada familia, junto a las trabajadoras sociales, porque son cosas que necesita la provincia para crecer”.
«Somos un Ministerio de puertas abiertas, que nos propusimos trabajar de la periferia para el centro y queremos ver con nuestros propios ojos las necesidades para poder solucionarlas», remarcó Santander.
“Sabemos que no traemos soluciones y que esto es solo una ayuda” – agregó el funcionario – «porque también entendemos que la Rioja no está exenta de las políticas de ajuste del gobierno nacional y comprendemos que los más afectados son nuestros vecinos del interior». En ese marco, el ministro se comprometió en reforzar la entrega el monto de módulos alimentarios en el departamento.
De la reunión con las autoridades del Municipio surgió también la propuesta de trabajar en conjunto en la puesta en funcionamiento de una colonia de vacaciones, donde los chicos puedan contar con un espacio de esparcimiento con actividades que fomenten el deporte, la cultura y la alimentación saludable.
Seguidamente, los funcionarios visitaron a beneficiarios del programa «Compartiendo el Pan» donde el Ministerio se comprometió a brindar colaboración en este último tramo del año para que puedan continuar con su trabajo sin que les falten insumos.
La jornada culminó con la visita a una familia que habita en el paraje Pampas Chicas, a unos kilómetros de la cabecera departamental.
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