Según manifestó la propia protagonista, alrededor de las 18, ella caminaba sola, en dirección al sur, por calle Yrigoyen, con sus auriculares colocados y escuchaba música, cuando de repente sintió un manotazo en la cola, que al parecer por la misma inercia o producto de haberse quedado enganchado con el elástico de la calza, le bajó varios centímetros la prenda de vestir.
Al margen de la ingrata sorpresa, la mujer atinó a arrojarle la botella con agua que impactó al degenerado que ya iba en carrera, y que a pesar del golpe siguió su huida por lo que la víctima comenzó a perseguirlo por calle Vélez Sársfield en sentido este.
Cerca de la intersección con calle Buenos Aires, una mujer que vio la corrida le pidió a otro hombre que lo detenga al joven que iba delante de la chica, y de esa forma lograron frenar la huída del degenerado sobre la esquina de la última calle mencionada, frente a un reconocido local de ropa; y se pidió la participación de la Policía, que de inmediato llegó al lugar.
El joven, que fue identificado como Marcos Romero Espeche (20), del barrio Carlos Saúl Menem, fue trasladado hasta Comisaría Primera, pero finalmente la mujer que sufrió el ataque sexual no presentó denuncia, por lo que el agresor fue llevado y alojado en Alcaidía de manera contravencional.
Sobre el hecho, el segundo jefe de Comisaría Primera, Ramón Ochoa, remarcó que fue casual, que la víctima no conocía al joven, pero que igual la mujer no quiso presentar la denuncia.
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