El Consejo Superior de la Universidad Nacional de La Rioja aceptó las renuncias del rector Enrique Tello Roldán, del procurador Gustavo Díaz, del secretario del Consejo Hugo Campos, de Mariela de la Vega (a cargo de OSUNLAR) y de María Cecilia Tello (hija del rector y asesora letrada). Pero no consideró las renuncias de los cinco decanos de la institución como solicitaban los «rebeldes» que, por dicha razón, mantienen la toma de la sede universitaria.
El Consejo Superior, que además confirmó la fecha del 12 de octubre para reunir a la Asamblea Universitaria, sesionó este martes en la sede del Centro de Investigaciones, CENIT, sin escuchar los planteos de los alumnos y docentes que resisten al tellismo ni la demanda de los miles de manifestantes que se expresaron el domingo en Plaza 25 de Mayo en apoyo a la normalización y democratización de la casa de estudios.
La asamblea «rebelde» anticipó que hay puntos básicos que no se negociarán y por eso exigen “las renuncias públicas, indeclinables, y ante Escribano Público del Rector, los Decanos de Departamento, los Decanos de Sede, y el Consejo Superior”.
También solicitaron «que las elecciones sean directas para los cargos de Rector y Vicerrector, en donde votarán todos los integrantes de los claustros de acuerdo a los criterios que los mismos elijan. Sumamos al pedido, que se prohíba la reelección por tiempo indeterminado de los cargos superiores», dice el documento de la asamblea emitido este martes.