Durante la jornada del Martes, se instaló en la agenda el caso del Productor vitivinícola de Malligasta que pasó de pagar 3 a 10 millones de pesos en concepto de Luz de Febrero a Marzo.
El gobierno provincial no quiere echar culpas, en todo caso se debe hacer cargo de la responsabilidad de quienes votaron este modelo brutal de ajustes y tarifazos descomunales que gobierna el País.
Desde que el presidente actual hizo los anuncios de su plan de gobierno, el sector eléctrico advirtió cómo serían los ajustes que se impondrían y los impactos que habría no solo en los hogares riojanos sino en todo el arco productivo e industrial de la provincia.
La quita de subsidios y la actualización tarifaria, perjudicó a todos los sectores de manera directa e indirecta.
¿Qué sucedió? Fácil, el Gobierno Nacional anunció que dejará de subsidiar las tarifas de luz a comercios, industrias y pymes, limitando la asistencia estatal solamente a los sectores vulnerables; y de esta manera que los grandes usuarios paguen el precio real de la energía.
“El nuevo esquema no contiene ningún tipo de subsidio a las actividades productivas. No sería compatible subsidiar a la energía y tener precios liberados” había dicho en enero Salvador Gil, funcionario de la Secretaría de Energía de Nación en una nota de Página 12.
“En ese sentido, tras la devaluación de diciembre, la situación que debe levantar Javier Milei se parece, en medio de la aceleración inflacionaria, a la de ocho años atrás. Recién este mes la Secretaría de Energía puso en marcha una masiva quita de subsidios a hogares de altos ingresos, comercios e industrias pymes, hospitales, escuelas, clubes de barrio, edificios y el alumbrado público, que llevará a incrementos en algunos casos superiores al 400% en las boletas”. (nota de Clarin )
Esto es algo de la realidad que hoy vivimos en la provincia y que avizora un futuro cercano mucho más complejo. Los comercios, productores e industriales deberán trasladar ese costo a sus gastos operativos. La pregunta que preocupa es ¿cuáles deberán eliminar de la lista? ¿los lápices, los trabajadores, abaratar materia prima, desenchufar las heladeras de noche?
La actualización de la tarifa eléctrica repercute en su costo operativo y por ende en el del consumo, ¿qué precio le pondría hoy una persona que hace alfajores caseros a sus variedades tipo cordobés? El descontento social se siente en el bolsillo, en la bolsa del mercado, en lo que empiezan a dejar de hacer y en lo que deben decidir realizar para poder sobrevivir, ¿cuánto más puede aguantar una boutique sin nadie va a comprar ropa porque no le alcanza la plata para un nuevo suéter? La crisis, más tarde o temprano llegará a todos.
Hay que saber leer y escuchar, pero sobre todo no olvidarse quiénes mienten, quiénes advierten y quiénes serán los que realmente defiendan a la gente, a los productores, a los comercios, a la industria. Hay que pagar lo que valen las cosas, pero no a cualquier precio.