«Si bien la Policía actuó bien en el robo a mi comercio, a muchos otros y a domicilios particulares violentaron autos y fue más el daño que hicieron que lo que robaron. En este caso son chicos de 15 años que semanalmente hacen tres robos. La Policía los detiene, la justicia no tiene herramientas para penarlos, están en las calles y vuelven a delinquir», expresó.
A su entender, la única herramienta que les queda a los damnificados es ir contra los padres de los adolescentes con causas penales.
Recordó que en el caso de Consumax robaron dinero en efectivo que fue recuperado pero no en su totalidad. En su caso, «las cosas robadas las llevaron a la casa por lo tanto la madre estuvo sabiendo».
«Queremos que alguien pague por todos los daños causados», apuntó y consignó que la solución es la creación de un área de Asunto juveniles en Chamical.