Según pudo averiguar RiojaLibre, estaría casi cerrado que el candidato del oficialismo para ser el Decano en el Departamento de Aplicadas es el Ing. Alberto «Mico» Brizuela. Lo curioso es que Brizuela tiene 70 años, con trámite de jubilación iniciado y jamás estuvo en la Toma que inició estre Proyecto.
Es cierto que tiene muy buena imagen en el ámbito universitario, pero es igual de cierto que ni debe saber que hubo una toma en la UNLaR. Algunos consideran la candidatura de ‘Mico’ como «una burla para los que estuvieron arriesgando todo en aquella gesta histórica Toma que dio comienzo a este Proyecto».
Sin embargo, Brizuela sería solo el Chivo expiatorio de Gaspanello para ubicar a su verdadero delfín como Decano: Ricardo Aldo Giuzzonato. Aparentemente, la movida es que una vez de Decano, Brizuela concrete su jubilación con el cargo (aumenta considerablemente el monto del sueldo), renuncia y asume el Ing. Guzzonato.
Ahora bien… ¿Quién es Guzzonato? Un tapado sin consenso para ir como candidato por la pésima imagen que ostenta. Guzzonato en el principio de la Toma respaldó fervientemente a Enrique Tello Roldán, condenando a los alumnos que participaban del levantamiento, porque era -y es- consejo del Dpto de Aplicadas.
Luego se dio vuelta y apoyó la toma, sus colegas lo definen como un «clásico tibio que son oficialistas por naturaleza sea quien sea el oficialista». Para lograr el triunfo de Mico Brizuela (y permitir el arribo de Guzzonato al decanato), Gaspanello tiene planeado presentar varias listas; la intención es diezmar a Eduardo Delgado, que viene creciendo en la consideración de todos los estamentos y amenaza con sacarle al calderonismo Aplicadas.
Un personaje a tener en cuenta en este armado calderonista es la Ing. Claudia Santander, ultratellista, que se la observa subir mañana y tarde al despacho de Gaspanello, entrando y saliendo de la Junta Electoral.
La carrera electoral en Aplicadas ya está lanzada. El objetivo del oficialismo parece ser bien claro: impedir el triunfo de Eduardo Delgado.
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