Según la ex de Bomparola estos son los clientes de su ex pareja; entre paréntesis ponemos los nombres Vitali no se anima a dar publicamente:
Un reconocido músico de una banda de rock (ZETA BOSIO, DE SODA STEREO)
La esposa de este músico. (ESTEFANÍA IRACET)
Una vedette que participó del «Bailando» (MARÍA EUGENIA RITÓ) Ver esta nota para comprobar la amistad de Ritó e Iracet: http://exitoina.com/2013-10-09-211109-maria-eugenia-rito-mimosa-con-la-mujer-de-zeta-bosio/
El dueño de una reconocida parrilla de Palermo (MARIDO DE FLORENCIA DE LA V)
El dueño de una reconocida firma de venta de zapatos. (RICKY ZARCANI)
El dueño de un reconocido restaurante de Pilar (NARDA LEPES)
Un dentista de famosos.
Un relacionista público famoso.
Una Vedete y su hija (MORIA CASAN Y SOFIA GALA)
Entre los nombres que se rumorean también aparecen Axel Kicillof, Teo Gurierrez, Natalia Oreiro y Mollo, Juan Abal Medina.
FAMOSA CONSUMÍA 12 MIL PESOS POR DÍA EN DROGAS
Viviana Vitali, invitada en «Intrusos», contó fuertes detalles sobre cómo le vendía droga a famosos su expareja, Rodolfo Bomparola.
«Él le vendía a clientes VIP. Como eran de alto target, nunca iba a tener problemas. Vendía en Las Cañitas. Él me dio nombres de famosos. Para él era un orgullo venderle droga a celebrities. La causa importante es que Bomparola vende en un barrio caro como Las Cañitas hace 15 años. Acá el problema es el proveedor, no los consumidores», disparó Vitali.
También contó con lujo de detalle la reacción de Bomparola ante la muerte de Jazmín de Grazia. «Rodolfo llegaba y ponía todos los noticieros. Cuando ve la noticia de Jazmín me dice: ‘Que bárbaro, esta piba murió tomando de la mía’. El le había avisado, ‘tené cuidado, si después tomás un ansiolítico para bajar no te metas en la ducha, metete en la cama», explicó.
«Una famosa gastaba 12 mil pesos por semana en droga», adelantó Vitali, pero no quiso dar más detalles ni decir de quién se trata.
En la entrevista se refirió a la relación de Bomparola con la modelo Zahina Rojas. «Era un cliente común, venía una vez por semana a comprar. Ella me ofreció descuentos para comprarle ropa a mi hijo. A Bomparola lo llamaba tío, y él le decía sobrina», concluyó.