Redacción de RiojaLibre
En medio de un partido de básquet aparece, de pronto, lo increíble: sin que la mitad de los observadores —o sea, de nosotros— se dé cuenta un gorila cruza la escena, se detiene para golpearse el pecho y sigue su camino como si nada. Para muchos de los que ven esta prueba el gorila no existe, es invisible. Tanto, que cuando el efecto se desenmascara, están convencidos de haber sido engañados.
Esa es la síntesis de el gorila invisible del libro que citó Alejandra Oviedo para fustigar a Julio Martínez: El Gorila Invisible. «El Gorila Invisible crece pero no hace nada, no está presente cuando se lo necesita», afirmó.
«Escrito con humor y rigor científico, El gorila invisible no se limita a mostrar nuestras —a veces— increíbles falencias a la hora de interpretar el mundo, sino que incluso brinda algunos consejos prácticos para mejorar nuestro desempeño cognitivo», dice la crítica del Libro.
Luego de su introducción, Oviedo le entregó el libro a Inés Brizuela y Doria. La cara de la Diputada radical al recibir el ‘regalo’ de su par chepeña fue indescriptible. Un capítulo más del Jueves Negro que vivió la legisladora radical.