Por primera vez, el Premio Abanderados distingue a un Joven Abanderado, categoría especial creada para reconocer y difundir el ejemplo de argentinos menores de 18 años que trabajan para los demás. De entre todas las postulaciones recibidas, Ashoka Argentina eligió a Milagros Aumada. Ella representa a muchos jóvenes que nos dan esperanza en un futuro mejor.
Con solo 16 años, Milagros lidera el Roperito Misionero, donde recolecta, selecciona y arregla ropa para después donarla a familias de su pueblo, San Blas de los Sauces.
«Mili», como todos la llaman, comenzó el proyecto a partir de una consigna en una clase de su colegio, el José Manuel Estrada. Sumó a muchos de sus compañeros de curso y crearon el Roperito Misionero.
Todo comienza con lo que ellos llamán «ir a misionar»: los chicos recolectan indumentaria, calzado y alimentos de las casas de distintas familias de la localidad, contándoles su proyecto para que más personas se sumen a dar un aporte a los más necesitados.
Luego, Mili y sus compañeros se organizan para arreglar y clasificar las donaciones en su tiempo libre. Para ello, cuentan con un espacio cedido por el Colegio en el que pueden guardar y ordenar todo lo recaudado.
A pie, en auto o en bicicleta, recorren parajes a lo largo de la ruta 40 charlando con las familias para atender a sus necesidades. Llevan un registro de los pedidos más urgentes para poder volver a traerles lo que les falta. Así, superan el aislamiento geográfico y crean un vínculo afectivo tan importante como la ayuda material que prestan.
Así agradeció a sus seguidores en Facebook la joven sauceña:
Creo que no existen palabras suficientes para describir la magnitud de lo que siento… de lo honrada que estoy al representar a este gran grupo humano que sí, trabaja e invierte su tiempo, dedica el corazón en lo que hace, porque sino esto no tendría sentido. De recibir semejante distinción como Joven Abanderada de Argentina! De haber sido elegidos entre medio de muchos proyectos de los que puedo decir con seguridad y con humildad, que ganamos todos con simplemente tener las ganas y el valor de decir a pesar de todo: Yo puedo, yo quiero hacerlo, y me voy a mover para lograrlo.
Nos tenemos que animar, para comenzar una cadena increíble e infinita con algo tan pequeño.
Cuando nosotros damos… recibimos mucho más de lo que piensan, recibimos sonrisas sinceras, recibimos confianza para escuchar historias de vida que nos hacen crecer de una manera inexplicable. Ganamos experiencia en esta vida en la que estamos para dar una mano con lo poco que tenemos, para mirar en el sentido más profundo de la palabra y saber diferenciar en lo que realmente vale, lo que es esencial.
Espero que a todos los que vean nuestra humilde historia, les llegue lo que somos realmente, lo que sentimos.. poder contagiar, y si sirve para inspirar a que más jóvenes se unan a algo tan simple, pero tan valioso como es mirar más allá de nuestros ojos, en donde hoy en día estamos un poco cegados…Se habrá cumplido el objetivo más grande.
El roperito que crece cada día, como miles de sentimientos solidarios en toda nuestra patria, y en el mundo, se sustentan de ese hilo generoso, de esas manos fundamentales que forman una cadena interminable para que todo funcione.
Me siento muy afortunada de este año representar con nuestro proyecto a mi pueblo San Blas de Los Sauces, a mi Rioja y a esa esperanza como ellos le llaman de nuestro país! Gracias #PremioAbanderados2016! Gracias a todos y cada uno por esos deseos de corazón hermosos!


