Qué linda saliste en la producción, Kate ¿Te gustó?
Si me gustó mucho sobre todo por la temática de la película. Me sentí identificada. Yo soy así. Soy una guerrera absoluta en todos los aspectos de mi vida… siempre al frente dando batalla cada día y llevando el control absolutamente de todo.
¿Te gusta el hombre argentino?
El hombre de aquí me encanta. Ustedes tienen un “no sé qué” que la verdad, te enamora. Son unos conquistadores empedernidos, todo el tiempo tienen una frase, una mirada, un gesto, algo que te desarma por completo.
Escuche por ahí que te encaran muchas mujeres ¿Es así?
(Risas) Es cierto, siempre, todo el tiempo ¡y me encanta! A los hombres normalmente se que le provoco cosas, pero en mi caso llegarle a las mujeres en ese sentido me divierte mucho, además soy una gran admiradora de la belleza del cuerpo femenino, me atrae.
¿Y accediste a algunos de esos encares?
Todavía no, solo unos besos, bah, ellas me besaron a mí, también me tocan la cola (risas), pero a mi más que molestarme me gusta. Aunque aún no se dio la posibilidad de tener relaciones con una mujer, seguro que estaría con una chica, no se me presentó el momento ni la que me encante pero ya llegara y porque no ronronear un poco (risas)
¿Tus padres decían que estabas poseída por el diablo?
Así es, ellos pensaban eso porque mi comportamiento estaba muy fuera de control con respecto a lo que se me había enseñado desde que era una niña en mi país.
Nos enteramos que tu debut sexual fue hace poco ¿Por qué?
Precisamente por la educación tan religiosa que yo tuve, yendo a la iglesia y con padres que son protestantes ortodoxos. Por eso mi primera vez fue aquí en Argentina con mi novio de aquel entonces a los 24. Vine con mucho equipaje emocional con respecto a eso… así que aquí ¡¡¡me liberé!!!