Ángel y Rosa, junto a su hijo, tienen un minimarket en el barrio Cementerio sobre 1 de Marzo y ha sido desde hace años el medio de sustento económico para su familia, en la mañana de este viernes se emocionaron ante la culminación de la obra de embellecimiento de fachada y la visita de la diputada provincial, Teresita Madera.
“Solo tenemos palabras de agradecimiento, es muy gratificante ver nuestro pequeño negocio mejorado, con pintura nueva; hoy en día es muy difícil mantener el comercio y mucho más invertir en estos detalles”, detalló la familia.
Madera sostuvo “queremos ayudarlos a seguir adelante en este lugar que les ha servido para mantener su familia, hoy ampliamos sus posibilidades al poder acompañarlos, al poder demostrarles que hay un gobierno presente que se interesa por la economía de su gente”.
Fortalecimiento del empleo en los comercios barriales
No es nuevo para nosotros tener que lidiar con las dificultades. Somos un pueblo que históricamente ha tenido que conquistar su progreso y su bienestar a base del esfuerzo y el sacrificio de muchos. Sin embargo, no deja de preocuparme de manera especial el momento económico de nuestra provincia.
Las políticas nacionales avanzan aceleradamente en reinstalar el desempleo, en particular en aquellos territorios en el que las actividades productivas por fuera del Estado no son las predominantes o bien requieren de un permanente acompañamiento gubernamental para ser rentables.
Según datos oficiales entre 2016 y el presente año, 2073 riojanos perdieron su trabajo Si se analizan los rubros afectados encontramos que toda la actividad privada incluso la educativa se vio afectada por el ajuste “necesario para el bienestar general “que promueve el gobierno nacional y que es el fundamento de sus erráticas e impunes intervenciones en el campo económico.
Dentro del abanico de áreas productivas afectas el comercio local aparece como una de las actividades más dañadas. La caída de las ventas genera despidos y los despidos generan un quiebre en la vida de las personas y sus familias.
La dignidad de los pueblos y el derecho a un trabajo y salario justos, pareciera importarle muy poco al gobierno nacional que denodadamente intenta que los grandes números de la economía le cierren para que los intereses de los que siempre tuvieron sigan prevaleciendo.
No es sencillo resolver este problema, pero tenemos que intentarlo. Tenemos la obligación de ocuparnos en encontrar alternativas, aunque sea en escala pequeña que nos permitan solidariamente brindar algunos incentivos al pequeño comercio local, que nos permitan no quedar atrapados en el intento de Cambiemos de consolidar una Argentina para pocos.
Poner a disposición esta herramienta es poner “un presente” un “aquí estamos” que nos parece imprescindible para este momento. El comercio barrial es una actividad económica de gran valor.
Las familias necesitan de él, tanto como el comerciante de las familias. No solo por la comodidad, o la cercanía, sino que además las particulares necesidades de los barrios pueden encontrar una adecuada respuesta en estos emprendimientos.
Estos incentivos tienen por finalidad acompañar a los comercios y a sus trabajadores en la búsqueda de estrategias para sostener y en la medida de lo posible ampliar su clientela.
Los pequeños gestos siempre suman y hoy es tiempo de sumar y no restar. Es tiempo de estar juntos, convocados por aquello que consideramos son problemas o aspiraciones compartidas.
Volver a sentirnos parte de una comunidad, es una forma de vida que en algún momento tuvimos y dejamos atrás.
Es hora de recuperar la vivencia de sentirnos parte de algo que esta por fuera de nosotros pero que es valioso porque nosotros somos parte de ese espacio: la comunidad.
Expresarnos, escucharnos, tomar posición sobre las cuestiones sociales que afectan nuestras vidas es un buen comienzo para volver a constituirnos en un nosotros.
Así hablar de nuestros comercios, preocuparnos por el destino de quienes trabajan en ellos, no debiera ser una acción aislada. Por el contrario, cada uno de nosotros puede fortalecer desde su lugar, toda actividad social, económica, cultural deportiva, educativa que sume al bienestar que todos tenemos derecho a vivir.