La fiesta democrática que se vivieron con la elecciones en la UNLaR ya quedó atrás, y quedan cuestiones que exigen ser revizadas bajo la lupa. Chicanas y enfrentamientos de algunos Docentes -con alumnos a los que tienen ‘formar’- inexplicables e inconcebibles en un ámbito de formación académica. Los alumnos no deben padecer ningún daño colateral por enfrentamientos políticos. ¿Están en condiciones de tomar exámenes sin ser influidos por esas ‘chicanas’?.