Los vándalos robaron pertenencias de los alumnos, orinaron y defecaron en las aulas, ayer por la tarde. Los padres retiraron los hijos, reclamando una desinfección y más seguridad. La escuela lleva dos semanas con incidentes y robos. El Director hizo la denuncia en la Policía. Acusan a una ordenanza que está en «rehabilitación» (probation). Información en proceso.
Su director, Daniel Molina, aseguró que la escuela continuamente es objeto de ataques destructivos. Los malvivientes tendrían la única intención de provocar daños al mobiliario, instalaciones e incluso al material didáctico.
Molina solicitó a la comunidad del sector que colabore con la protección del patrimonio y denuncie inmediatamente cuando adviertan maniobras malintencionadas que perjudiquen al establecimiento, “que definitivamente es de todos y es el lugar donde muchos chicos reciben educación”.
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