Al día siguiente, otra protagonista habló en el mismo programa: contó cómo fue el «momento caliente» que vivió con el delantero.
Se trata de Sofía Santillán, de 20 años. «Me dijeron que iba a haber un asado. Me dijeron: «Te pido por favor que seas reservada, que no cuentes nada. Si querés venite con una amiga pero que sea de confianza», comenzó diciendo y aclaró que tanto Rojo como Higuaín «están buenos pero no los seguía».
«Bailé un rato largo, se iba, volvía, se iba, volvía», dijo sobre su encuentro con «El Pipita» que no sólo fue en el boliche, sino que luego fueron en auto con él, su mánager y varias personas más a un departamento («no era grande; dos ambientes, estábamos todos en el living») a seguir bailando.
Ante la pregunta de si se besaron, respondió: «Si, un pico. Empezó jugando, estábamos bailando cerca, empezamos a hablar y me dio un beso, pero se dio». Pero según contó después, en el auto hubo otro beso. «¿Más calenchu?» le preguntó Pía Shaw, la conductora, y ella reconoció: «Sí, porque estábamos más tranquilos».
«Él me preguntó que le gustaba de él y yo le dije que me gustaba la barba. Me contestó que yo también le gustaba. Me dijo qué le gustaba mi cola», confesó y continuó: «A todo esto, cuando ‘Pipita’ se iba, Marcos venía. Y en un momento yo estaba hablando con Rojo, vino ‘Pipita’ y dijo: ‘Me parece que hay alguien que está interfiriendo'».
«Baila bien», aclaró sobre el delantero de la Selección Argentina. ¿Y qué fue lo que pasó con Marcos Rojo? «A mí se me había bajado el cierre de la espalda hasta la mitad y él me lo subió con las manos», respondió. «Yo creo que lo que pasó esa noche, y ellos también lo deben pensar, es algo que se podía evitar. Terminaron invitando gente que creyeron que podrían confiar».
«Si yo no hice nada con ‘Pipita’ fue porque había mucha gente», disparó. «No pasó nada porque no era el momento, el lugar, la gente», dijo más tarde para luego arremeter: «Si hubiese estado no lo diría».
Un móvil de Infama fue hasta el aeropuerto de Ezeiza donde el delantero de Nápoli viajaba a Italia. Ante la insistencia de la notera, dijo «No me estás respetando», «No tengo nada qué decir» y «Dejame en paz». Prefirió omitir la situación; sin embargo no avaló ni desmintió el relato de Sofía Santillán. ¿Será verdad lo que dijo ella? ¿Por qué él decidió no hacer ninguna declaración?