Redacción de RiojaLibre
Así como el PJ tiene un enorme desafío en Capital (debe vencer al Inesismo y revertir el escenario en un territorio que le fue adverso en los últimos años); Juntos Por La Rioja se enfrenta a una situación aún más complicado: sin las únicas dos ‘figuritas’ que usó en los últimos 15 años, deberá enfrentar al PJ en una elección provincial.
Desde hace 15 años, cada dos años, el radicalismo y su frente opositor (Fuerza Cívica Riojana, Cambiemos, Juntos Por La Rioja) usó solo dos nombres como máximos candidatos para enfrentar al Peronismo: Julio Martínez e Inés Brizuela y Doria. El año que viene, no podrá usar esa dos figuritas, ya que tanto el Senador Julio Martínez como la Intendenta Inés Brizuela y Doria tienen mandato hasta 2023. Ninguno de los dos resignaría su cargo para pelear por la cámara baja del Congreso.
Si utilizamos el condicional, es por que la ausencia de otros nombres en la oposición provocó una situación inédita en 2013: Inés Brizuela y Doria resignó dos años en el Congreso de la Nación para ser candidata a Diputada Provincial por Capital. Es que no había ‘otro’ candidato.
En 2021 se repetirá la historia: Julio Sahad (logró su banca ‘colgado’ de Julio Martínez en 2017) deberá renovar su banca, y no hay ningún candidato disponible que mida al menos dos cifras a nivel Provincial. Los únicos tres tienen mandato hasta 2023: Julio Martínez, Felipe Álvarez e Inés Brizuela y Doria.
Ante esta situación, el peronismo puede volver a salir con dos listas, con altas posibilidades de quedarse con las dos bancas en juego.