Redacción de RiojaLibre
La danza de nombres está, pero lo cierto es que al día de hoy no hay ningún Ministro confirmado. Con la renuncia en mano de todos sus funcionarios de primera línea, el Gobernador se toma su tiempo para analizar los cambios pertinentes.
Lo que sí sería un hecho es el achicamiento del Estado. Siguiendo la línea de Nación, y entendiendo que el mensaje de las urnas, Ricardo Quintela tendría la decisión política tomada de achicar su Gabinete. Se habla, por ejemplo, de la desaparición de la Jefatura de Gabinete, con la vuelta del Ministerio de Gobierno y Seguridad. Es decir, se combinan dos Ministerios actuales en uno solo. Los rumores inican que aquí podría asumir alguien que ya estuvo en esta cartera, del Interior y hoy en el TSJ.
Otro Ministerio que desaparecería es el de Infraestructura, siendo absorvido por el nuevo Ministerio de Hacienda y Obras Públicas. Y tampoco se descarta que aquí recaiga también el Ministerio de Vivienda, con rango de Secretaría (¿para qué sostener el MInisterio si está claro que Nación dejará de enviar fondos para hacer la cantidad de obras que se hacen actualmente?). Dos nombres pican en punta para esta nueva cartera: el actual Jefe de Gabinete o el actual Ministro de Industria, Empleo y Trabajo.
El Ministerio Transporte y Telecomunicaciones llegaría a su fin. Duró poco la experiencia para el massista Ismael Bordagaray. Transporte volvería a ser Secretaría con la continuidad de Alciria Brizuela, faltaría definir qué Ministerio absorvería a este área.
Quizás no hay que buscarle reemplazo al senador electo Fernando Rejal en Produccion. Podría ser otro de los Ministerios que se acoplen a otro. En la Secretaría no hay dudas que seguirá Harry Pérez, con éxito probado en su Gestión.
Desarrollo seguiría existiendo, aunque los trascendidos hablan de un cambio en la conducción. El hoy titular de EDELAR podría arribar a este Ministerio que podría absorver otras Secretarías, como por ejemplo Juventudes. Esto significaría que el Ministerio de Turismo y Culturas también podría tener fecha de vencimiento.
La gran duda sigue siendo la creación o no del nuevo Ministerio del Interior, que acapararía todo el caudal y la contención política que hoy ostenta la Secretaría General, y que incluso podría absorver a algunas otras Secretarías. Al día de la fecha no hay definiciones sobre si la Diputada Nacional que suena para esta área renunciará en el Congreso (para venir al Gabinete) o culminará su mandato hasta 2015.