Haciendo además especial foco en la mina Veladero, con motivo de los dos incidentes ocurridos en la misma en el último año. «Se agrega un nuevo control, nos viene muy bien y es un gran avance porque apuntan a que no sucedan más los derrames que pongan intranquila a las personas», manifestó el legislador.
«Que se involucre el gobierno de Canadá no es cosa menor, obligará a estar más atentos a cambios de un costo significativo. Lo menos que se merecen los sanjuaninos es llevarles un poquito más de tranquilidad», remarcó el legislador.
Canadá inicia un proceso para proteger la actividad minera exigiendo el ejercicio de buenas prácticas a sus empresas. Tanto que actúen dentro de su país, y como ahora, fuera de él. De esta manera se suma un nuevo control a la actividad en nuestro país a los ya existentes. Hoy, los controles se dan en las órbitas provinciales principalmente, y en menor medida en el área nacional. Esto por las competencias constitucionales dadas a las provincias en materia de recursos.
Perder el apoyo del gobierno de Canadá en los mercados significa una menor cotización del valor de la acción de la empresa en las bolsas. Algo que repercute en el corazón de la mayoría de los proyectos mineros y, especialmente, en todos los ejecutados por compañías grandes. En la minería, al ser proyectos largos en el tiempo (20, 30 años en promedio), lo que pasa alrededor de las acciones constituye un eje vital en el giro de las empresas.