Redacción de RiojaLibre
Las estrepitosas condiciones en las que se encuentran las instalaciones del Club Defensores de la Boca provocaron el hartazgo de los socios. «El Club se cae a pedazos, Ramón Galleguillo insistió que quería el Club Defensores y ya perdió una final en el 2017 sin saber la gente qué hizo con las recaudaciones contra Andino», disparan.
«También jugó -agregan- un federal C y no clasificó (no pasó primera rueda), se fueron todos los jugadores por falta de pago, no quedo ninguno ni los históricos quedaron; ahora en su gestión el club no presentará inferiores (sexta división)».
La crisis no solo es deportiva, sino también institucional. El predio de Defensores de la Boca es una mugre, no se puede entrenar y la cancha un desastre. «Y tanto que decía que levantaría la institución», se quejan los socios y luego añaden: «para colmo le cerró las puertas a un grupo de hinchas, no llama a elecciones, pero lo peor de todo es que no explica dónde está la plata, son más de 250 mil pesos en recaudaciones y solo le dieron él y sus aliados 1000 pesos a cada jugador en la final, por eso se fueron todos».
LAS FOTOS QUE SE TOMARON DE LAS INSTALACIONES HABLAN POR SÍ SOLAS:
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