A medida que se van conociendo las definiciones, el terreno de las ‘especulaciones’ se va reduciendo. Según la información que maneja RL, en la oposición se comenzaron a edificar certezas, mientras que en el oficialismo sigue reinando la incertidumbre.
Este mes, la agenda política suele estar signada por el Día de la Lealtad peronista, que se celebra cada 17 de Octubre. Este año no será la excepción, y los festejos que se organizan al respecto evidencian cuáles son las realidades disímiles que tienen los distintos sectores del peronismo riojano.
En el Casismo (oficialismo provincial) no hay armados locales a la vista; a diferencia de otros años, se evitará un acto multitudinario para demostrar el poder de convocatoria que caracteriza a este tipo de actos. Es que en el oficialismo no hay definiciones: ni siquiera el Gobernador y las figuras más importantes del espacio saben a ciencia cierta cuál es la estrategia para el año electoral entrante. Si aún no se tiene definido quién será el candidato, no se puede establecer quién cerrará el acto, cuál es la figura que el PJ debe resaltar. Según pudo averiguar RL, Provincia solo se limitará a participar del mega acto que el Peronismo organiza en Tucumán, sin mayores celebraciones oficiales en La Rioja.
En el Municipio la claridad se impone: absolutamente todos los espacios internos del Paredismo aseguran que ya están trabajando para ‘Paredes Urquiza Gobernador’. En ese sentido, desde el Palacio Ramírez de Velasco ya se trabaja arduamente en la organización del Acto, que –según ellos mismos anticipan- será histórico en cuanto a convocatoria. Si bien aún no está definido el lugar, se buscará un lugar al aire libre donde puede mostrarse en toda su magnitud la convocatoria. Algunos creen que la Av. 1° de Marzo es el lugar más apropiado.
El acto será todo un mensaje del Intendente capitalino, a Provincia y otros sectores del PJ, pero sobre todo al ciudadano peronista que habita cada rincón de la Provincia: más allá de la coyuntura actual, Paredes Urquiza es peronista, y lanzará su candidatura a gobernador en un día simbólico para el peronismo. APU sabe que para ser Gobernador le hace falta el apoyo del peronismo, y actúa en consecuencia. Será todo un tema la presencia de algunos dirigentes justicialistas del interior que apoyan –muchos de ellos ‘en off’- la candidatura del Intendente a la Gobernación. Habrá que estar atentos a ello.
Pero más allá el 17 de Octubre, la fecha que comienza a aclarar el panorama de cara a la disputa por la Gobernación, es el Viernes 9 de Noviembre. Ese día nacerá oficialmente Unidos Por La Rioja, un frente electoral en el que cohabitarán espacios políticos de diferentes orígenes partidarios. Si bien el radicalismo (Julio Martínez) y el peronismo no oficial (Paredes Urquiza) serán las principales patas de esta fuerza, habrá muchas otras vertientes justicialistas, como por ejemplo Teresita Luna, Felipa Álvarez, Ismael Bordagaray, e innumerables espacios peronistas departamentales del Interior.
Con este Frente, Paredes Urquiza se asegura ‘no traicionar’ al peronismo, por lo menos ‘en los papeles’. Se sabe que la ‘traición’ es un pecado que el elector peronista no suele perdonar; siendo candidato por Unidos Por La Rioja, APU no lo será por Cambiemos. Ergo, el Intendente será candidato por un Frente Opositor donde el peronismo será una parte fundamental.
Oficialismo en Apuros
Cuando se confirme el lanzamiento de Unidos Por La Rioja, será el turno de que el oficialismo mueva sus piezas. Con Paredes Urquiza confirmando su presencia activa en el Frente Opositor, al Casismo se le termina la variable ‘APU candidato o respaldando a la fórmula del PJ’. Aunque parezca increíble, aún hoy algún casista desprevenido sigue fantaseando con esa posibilidad.
El 9 de Noviembre, Paredes Urquiza y Julio Martínez comunicarán a sus seguidores cuál será la manera de definir la fórmula opositora, ya sea por internas o por consenso. Pero algo quedará claro: APU y Mashasha estarán en dicha fórmula, lo único que resta por dilucidar es el orden de los candidatos.
Sin Paredes Urquiza, y con los dos mejores hombres de la oposición en la fórmula que les disputará el poder, el oficialismo deberá terminar con las especulaciones. Tomar decisiones será imperante: si se dilatan las definiciones, se corre el riesgo de que varios soldados propios, cansados y viendo que en frente hay posibilidades concretas de contención a partir de 2019, migren a las filas enemigas.
Por otro lado, de confirmarse el frente Unidos Por La Rioja, se termina la especulación de disputar la Gobernación con cuatro listas fuertes en juego: Martínez y APU dividiendo votos por la oposición; y Casas y Beder dividiendo votos por el justicialismo/oficialismo. Con Unidos por La Rioja en marcha, la oposición muestra unidad, y obliga al oficialismo a seguir el mismo camino si quiere sostener las chances en la próxima elección. Una elección con Martínez-APU (o viceversa) enfrentando a Casas y Beder por separado, inclinaría la balanza a favor de la oposición.
‘Ni Casas puede lograr la reelección sin el respaldo de Beder, ni Beder puede volver a la Gobernación sin el apoyo de Casas’. Esa es la frase que sobrevuela el ambiente en el oficialismo, y que repiten cada vez con más convencimiento los distintos dirigentes (Intendentes, Diputados y Funcionarios), preocupados por lo que pueda llegar a pasar. Quienes conocen más de cerca al Gobernador y su antecesor, anticipaban que ‘llegado Febrero seguramente se juntarán y definirán qué es lo mejor para el Peronismo’.
Luego de esta definición en la oposición, con fecha puesta como punto de partida (9 de Noviembre), habrá que ver si ese ‘reencuentro’ puede dilatarse hasta Febrero, o se deberá anticipar.
Con las Internas casi descartadas, y APU jugando activamente en la Oposición, al PJ no le queda otro camino que apostar a sus dos figuras más fuertes: Sergio Casas y Beder Herrera. Con alguno de ellos en la fórmula y los dos en el armado de la estrategia, el oficialismo deberá dejar de debatir entre casismo vs bederismo, para unir fuerzas y –con la hermandad como principal bandera- luchar por la continuidad del peronismo en el poder. Caso contrario, al peronismo riojano se lo devorarán los de afuera.