Históricamente, diciembre es un mes complicado para los Gobiernos que vienen de padecer un duro golpe en las urnas. En todo el territorio argentino, el malestar generalizado en una gran porción de la ciudadanía no pudo contenerse por los esbozos de reacción de los máximos mandatarios ejecutivos. Tanto Cristina Fernández de Kirchner como Luis Beder Herrera supieron leer el mensaje del 27O y ejecutaron algunos cambios en sus respectivos equipos, pero –evidentemente- no alcanzó.
Con la salida de Guillermo Moreno y la llegada de Jorge Capitanich, la presidenta intentó imprimir una ‘renovación política’ que solo quedó reducida a mero cambios de nombres propios. Sorprendentemente, el Jefe de Gabinete abrió el diálogo con líderes opositores (José Manuel De la Sota y Mauricio Macri), pero muy rápidamente se vio obligado a ser un simple emisor de lo que se decide en el despacho de Cristina.
Capitanich responsabilizó a los Gobernadores y redujo la protesta social a actos exclusivos de conspiración y vandalismo. Ese parece ser más el pensamiento de Zannini y Parrilli que el de un Gobernador del Interior que conoce a la perfección la dura realidad que viven los empleados estatales. A su vez, Moreno se fue, pero la –ya a estas alturas- ‘ridícula’ negación sigue latente en el Gobierno; Kicillof aseguró que “en Argentina no hay una Inflación Preocupante”. Cambiaron los nombres, pero el espíritu K sigue intacto.
Cuando NO ser tapa es Mérito
El Gobernador riojano también sintió en carne propia la insuficiencia de los cambios impuestos. La expulsión e investigación por causas de corrupción de sus propios sobrinos (Gastón Millicay y Raúl Moreno) y Diego Ayán pre 27O, más el refuerzo de su Gabinete con la incorporación del Intendente de Castro Barros –Marcelo Del Moral- en Desarrollo Social y la salida del cuestionado Felipe Álvarez parecen no haber conformado al ciudadano opositor.
Beder Herrera tampoco logró apaciguar los reclamos de Gremios opositores, sino –por el contrario- con sus rimbombantes declaraciones, que –en muchos casos- por ser ciertas no dejan de ser inoportunas, no hizo más que fogonearlos.
Sin embargo, el Gobernador demuestra que su liderazgo sigue fuerte y sin fisuras; hasta ahora, tuvo el olfato necesario para para saber hasta dónde podía ‘apretar’. Cuando observó que el reclamo en la Plaza 25 de Mayo podía pasar a mayores, ordenó a sus funcionarios que acuerden con el Intendente de Famatina. De esta manera, logró quitarle fuerza a la Plaza, y la protesta de los gremialistas -que aún no negociaron con el Gobierno- ya no tuvo el mismo respaldo popular. Es decir, le quitó potencia a la Plaza y acalló las voces del reclamo.
Reafirmando su calidad de estadista y adelantándose a los hechos, mientras Guerra y Casas acordaban con Bordagaray y algunos gremialistas, Beder Herrera negociaba con Kicillof en Buenos Aires un adelanto de 150 millones de pesos para ‘costear’ esos ‘arreglos’ y poder cumplir con lo prometido. No mintió el Gobernador cuando aseguró que no tenía un peso para aumentos, para darlos tuvo que gastar a cuenta del 2014. El gran desafío del Ministro de Hacienda –Ricardo Guerra- será acomodar los números para que en el año entrante, el golpe de estos ‘adelantos’ no se sienta fuertemente en la sociedad.
Seguramente, el Gobierno se verá obligado a hacer algunos cambios en obras magnánimas que tenía planificadas. En Córdoba, De la Sota confirmó que se suspende el Festival del Cuarteto por la ‘situación sensible que atraviesa la Provincia’. La misma suerte corrieron los superclásicos (Boca vs River) en Mendoza y Córdoba; en La Rioja se rumorea sobre la posible suspensión del Chayero Sanagasteño, que tiene un costo aproximado de dos millones de pesos. Otra posibilidad es dejar en Stand By la construcción del Superdomo.
El Consuelo de tontos en el Gobierno Provincial es no figurar en los principales titulares de TN, La Nación, Clarín y otros medios nacionales; cuando en Buenos Aires se habla de las Provincias con mayores riesgos, Córdoba, Tucumás y Chaco ocupan esos lugares. Debe reconocerse que Beder Herrera tuvo la celeridad suficiente para controlar a tiempo todas las protestas que se fueron sucediendo. Lo peor parece haber pasado: los empleados estatales ya comenzaron sus vacaciones y a los líderes gremiales les será más difícil ‘arrastraros’ a la Plaza.
En el entorno íntimo del Gobernador se ilusionan con la sabia frase ‘Lo que no te mata, te fortalece’; auguran un comienzo del 2014 con la figura de Beder Herrera más fortalecida y sólida, edificándolo como un líder que supo superar con ímpetu una ola de protestas que en otras Provincias causó mayores daños.
Quintela, la materia pendiente
Para que el deseo de estos bederistas ‘optimistas’ se haga realidad, el Gobernador está obligado a concretar su apertura dialoguista con el Gobierno Municipal. Pareciera existir una relación directa entre la estabilidad y tranquilidad de la Casa de las Tejas con la relación ‘amigable’ con el Palacio Ramírez de Velasco. La variable indica que si caen las ‘acciones’ de la segunda premisa, indefectiblemente se pondrá en riesgo la primera.
La decisión más acertada del Gobernador en los últimos meses fue –sin lugar a dudas- abrir el diálogo con el Concejo Deliberante de Capital y comenzar el operativo ‘reconciliación’ con el Gobierno Municipal. Más allá de algunas ‘individualidades’, no se vio la presencia del sector del Intendente en la Plaza durante las Protestas. Con la impronta y fuerza del Quintelismo, seguramente la historia hubiese tenido un final distinto.
Ahora, es el turno del Gobierno Provincial de cumplir con su parte. El Ministro de Hacienda –Ricardo Guerra- ya escuchó los reclamos de Claudia Ortiz para ‘normalizar’ los números del Municipio. Esta semana habría novedades sobre la respuesta de la Provincia; se descuenta que serán buenas noticias para el Palacio Ramírez Velasco.
“Todo bien con el diálogo con los Concejales, pero va siendo hora de que Beder llame al Gitano», se escuchó coincidir a algunos funcionarios municipales. Según una fuente de RiojaLibre (100% confiable), todavía no se produjo ningún contacto directo entre Beder Herrera y Ricardo Quintela. No se descarta que llegue antes de fin de año. Por los tiempos que corren, se trataría de una gran inyección para fortalecer la paz social de cara al 2014.
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