Finalmente Marcos Perera debió reconocer que nombró familiares en cargos claves del área de Salud cuando asumió sus funciones como ministro. Entre ellos se encuentran sobrinos, primos y parientes políticos.
La denuncia la había realizado el personal del organismo, molesto por la falta de nombramiento de personas con años de labor con contrato en el ministerio y sin poder obtener una designación. Pero el funcionario lo había desmentido.
Sin embargo, el pasado fin de semana salieron a la luz los decretos de nombramientos. Ante ello, Perera debió reconocer este martes tal situación: “Nombré una secretaria privada que es familiar, es mi sobrina, porque es la persona que recepta y saca toda la información confindencial y a quien tengo confianza”, justificó.
“La otra persona que nombré es el jefe de despacho”, aclaró sin dar su parentesco, pero obviamente es familiar. Luego también sostuvo que “en el Parque Automotor hay otro familiar mio y es a quien le indiqué que busque todas las ambulancias y las haga funcionar, cosa que hoy ocurre”, expuso.
Además, sobre un contador de apellido Roncoroni, dijo que “es un señor que lo conocía de sistema de personal, de antes, y tiene un noviazgo con una sobrina mía y además a otro sobrino lo transferí desde otra área a Salud, no lo nombré”, relató.
Por último, el ministro dijo que “Douglas Nazareno es el primo de mi esposa y es uno de los consultores nacionales en neumonología de La Rioja. Que pregunten a quien sea si es idóneo o no para cubrir ese lugar. Tiene trayectoria como profesional capacitado y como laburante”, expuso.

