“Nuestra lucha de siempre era tener una ambulancia en la asociación”, comenzó diciendo y agregó: “Mi hermano era un tipo que siempre ayudaba a la gente. Manejaba la ambulancia cuando la necesitaban y ahora que él la necesitaba, no la tuvo”, se lamentó Díaz.
Contó que jugaron el primer tiempo, donde su hermano, “se mandó un partidazo”, resaltó. Luego de esos primeros 45 minutos, acudieron a tomar agua y allí fue donde notó un malestar en él. Le preguntó si se encontraba bien y él le respondió que sí. Sin embargo, narró, “Cuando me di vuelta él estaba en el suelo”.
Desesperado, pedía que alguien lo atienda. “Tardó un buen rato en llegar un muchacho. Lo atendió, le dio los primeros auxilios, pero no reaccionaba”, relató Adrián. En ese momento, ante la demora de la llegada de una ambulancia, un futbolista le ofreció llevarlo en un vehículo particular, él accedió y fueron al Sanatorio Rioja. Allí lo atendieron, pero lamentablemente el deportista ya no tenía signos vitales.
Al respecto, Díaz manifestó molesto: “Que ahora se diga que mi hermano es un enfermo y que murió por eso, es mentira. Mi hermano murió por desidia, por falta de atención médica y ambulancia”, remarcó.
Por último, manifestó que esto que le pasó a su hermano, “no tiene que ocurrir nunca más. Que no se empiece a jugar ningún partido hasta que esté a ambulancia como corresponde. Esto no tiene que pasar”, enfatizó.