Según lo informado por el comisario, Amadeo González, segundo jefe de la comisaría de Aimogasta, el conductor en cuestión, que forma parte del escuadrón de Gendarmería Nacional apostado en esta ciudad, fue identificado como Diego Matías Gallardo (25) quien se conducía en un automóvil marca Volkswagen Gol, negro, y lo hacía en compañía de otro hombre de apellido Barrionuevo y una menor de edad.
En cuanto a cómo se dieron los hechos, el comisario contó que cerca de las 19:30 se recepta una denuncia en donde una jovencita de 15 años había sido agredida por otra adolescente, y la denunciante relató que su agresora se había bajado de un auto color negro y le había propinado golpes.
Luego se toma conocimiento por medio de llamadas al 101 que un automóvil Volkswagen Gol, negro, andaba a alta velocidad y al parecer sus tres ocupantes ingerían bebidas alcohólicas.
Al intentar detener este automóvil a una cuadra de la plaza principal de la capital arauqueña, el conductor hace caso omiso, los esquiva e intenta darse a la fuga, pero se detiene de manera forzosa en la esquina de la plaza, debido a que el semáforo estaba en rojo y había un auto detenido delante de él.
Esto permitió a los uniformados de la Brigada Motorizada bloqueara definitivamente la circulación del rodado, y le pidieran al automovilista que descendiera del vehículo, pero éste lejos de acatar el pedido, puso reversa y al hacer marcha atrás termina por chocar con un auto que estaba estacionado en ese lugar.
Esto motivó que los agentes policiales intercedan y procedan a retirarlo del interior del auto, lo que generó un forcejeo con Gallardo, quien se resistió a bajarse del vehículo, pero finalmente pudieron sacarlo del rodado al igual que sus dos acompañantes.
Asimismo, el agresivo conductor mientras era llevado por el oficial hacia el móvil policial en calidad de detenido, arremetió contra una de las motos policiales que se encontraba estacionada, provocándole daños a la misma.
Por otra parte, el comisario González dio cuenta que la menor fue entregada a los progenitores, en tanto Barrionuevo quedó detenido contravencionalmente, y de Gallardo se hizo cargo el personal de Gendarmería.
No obstante, los cargos que se le aplicaron al conductor fue una causa contravencional por conducir en estado de ebriedad, y también, paralelamente, se han labrado las actuaciones del orden Penal por “Lesiones a un funcionario policial y daños a un vehículo de la repartición”. Finalizó González.