Pasaron las elecciones para cargos ejecutivos en La Rioja y –tal como te anticipamos en este espacio- con la aplastante victoria del Oficialismo, en el escenario previo de cara a las PASO y a las Generales de Octubre se observa una profundización de la distancia que separó al peronismo de la oposición el 5J. Con la derrota de su máximo exponente –Julio Martínez-, el radicalismo quedó con una evidente debilidad que no puede disimular, y en condiciones indeseables para afrontar un nuevo proceso electoral. Por el contrario, Luis Beder Herrera se encuentra en su momento más glorioso y puso a trabajar a toda la dirigencia del peronismo riojano para que –unidos- conviertan a las próximas elecciones en su ‘despedida triunfal’ de la Gobernación.
El karma que persigue por estas horas a Fuerza Cívica Riojana y todos sus militantes es un interrogante que nadie les puede responder –con argumentos- de forma positiva: ¿Si Martínez perdió con Casas por 15 puntos, cuán más catastrófica aún va a ser la derrota de Olivares contra Beder-Quintela? Cambiando nombres propios por calificativos jerárquicos, la pregunta se vuelve más pesimista para los opositores: ¿Si nuestra máxima figura perdió con su ‘muleto’ por 15 puntos, cuán más catastrófica aún va a ser la derrota de nuestro ‘muleto’ contra sus máximas figuras?.
No es para menos la preocupación para la UCR, ya que los 32 mil votos que hubo de diferencia en Julio (108 mil Casas a 76 mil Martínez), prometen incrementarse en Agosto cuando sean candidatos –ni más ni menos- que los dos dirigentes más importantes de la Provincia. Con Beder Herrera y Ricardo Quintela como candidatos estelares, el peronismo tiene como meta llegar a los 120 mil votos, logrando agrandar la brecha y soñando con quedarse con las tres bancas que se ponen en juego.
Para lograr las tres diputaciones, el PJ debe triplicar en votos a FCR; es decir, si se cumple la meta de llegar a 120 votos, Héctor Olivares debiera sacar 39.999 votos (o menos) para que las tres bancas queden en manos oficialistas. Con las planillas de resultados del 5J en las manos, los operadores peronistas aseguran que el sueño de las tres bancas no es una quimera, sino –por el contrario- una posibilidad con chances certeras de concretarse.
Veamos las ecuaciones matemáticas que hacen en el PJ. Sergio Casas sacó 108 mil votos, que están completamente asegurados para Beder-Quintela. En Capital, la suma de votos de Hugo Vera y Paredes Urquiza da alrededor de 65 mil votos, mientras que Casas obtuvo –en Capital- 50 mil votos. Por su parte, Julio Martínez obtuvo –siempre en Capital- 49 mil votos, cuando su única candidata a Intendente –Brizuela y Doria- logró alrededor de 34 mil votos. Es decir, se presume que existen 15 mil votos Q que optaron por Hugo Vera, cortando boleta y escogiendo a Martínez como Gobernador. Esos 15 mil votos irán en las próximas elecciones para Ricardo Quintela, líder y conductor del espacio; por lo que solo con la ‘corrección’ de los votos de Capital, Beder-Quintela ascenderían a 123 mil votos, y Olivares (FCR) descendería a 61 mil votos. Un dato que refuerza la versión de que estos 15 mil votos irán para el oficialismo: Quintela está tercero en la lista y es él quién necesita estos votos para ingresar al Congreso Nacional. Con respecto a los otros 20 mil votos que les quedan por restar al candidato opositor (de 61.000 a 40.000), en el oficialismo confían que se logrará porque ‘la participación bajará con respecto al 5J’. ‘Nosotros no vamos a aflojar, peor muchos opositores defraudados o decepcionados tras la derrota de Martínez no irán a las urnas; Olivares NO es Martínez’, se ilusionan en el PJ.
La esperanza del Peronismo no solo se basa en cuenta aritméticas, sino en la militancia y mística que aportan a una campaña electoral la presencia protagónica de Luis Beder Herrera y Ricardo Quintela. Siendo candidatos, el Gobernador y el Intendente capitalino ya comenzaron a desplegar sus estructuras, carisma y liderazgo en toda la Provincia. Si bien se estima que para Agosto será solo un anticipo, para Octubre (‘cuando sea por los puntos’) Beder-Quintela tirarán toda la carne al asador, poniendo a funcionar la maquinaria del aparato peronista en todos sus aspectos.
La UCR responde con Colectoras Invertidas
Ante este panorama totalmente desalentador, la oposición tiene una respuesta; pero –increíblemente- obedece a mecanismos que han criticado hasta el hartazgo: las colectoras. La UCR se esperanza únicamente en el ‘arrastre’ de votos de los pre candidatos a presidente para que su candidato no sea víctima de la derrota más papelonezca de la historia riojana.
Héctor Olivares –primer candidato a Diputado Nacional por FCR- tiene más del 90% de desconocimiento público; esto quiere decir que si tomamos -al azar- 10 ciudadanos riojanos, al menos nueve no conocerán a Héctor Olivares. Una mandamiento inquebrantable de la política electoralista dice que ‘un candidato que es conocido puede o no ser votado, pero un candidato que NO es conocido (como Olivares) jamás será votado’.
Sin embargo, la cúpula dirigencial de FCR no se muestra preocupada y –por el contrario- se manifiesta esperanzada: ‘una banca la tenemos asegurada y estamos luchando por la segunda’. ¿Cómo se explica esta contradicción? Porque la oposición confía que una gran porción de riojanos votará a Héctor Olivares, aunque no lo conozca y –en muchas casos- sin ni siquiera quererlo o saberlo. Olivares irá ‘pegado’ a seis pre candidatos a presidente: Mauricio Macri, Sergio Massa, Ernesto Sanz, José Manuel De la Sota, Elisa Carrió y Margarita Stolbizer.
Los riojanos que primen la elección presidencial y escojan a Macri, Massa o cualquier otro pre candidato opositor, y NO corten boleta, estarán metiendo en el sobre –sin saberlo quizás- a Héctor Olivares como Diputado Nacional. El Sistema de ‘Colectoras Invertidas’ beneficiará ampliamente a FCR, convirtiéndose en su única esperanza para las aspiraciones de Olivares. Beder Herrera-Quintela irán en una sola boleta, mientras que Héctor Olivares irá en 6 boletas, de tres Frentes Diferentes: CAMBIEMOS (PRO-UCR), UNA (MASSA-DE LA SOTA) Y FRENTE PROGRESISTA (STOLBIZER).
Veamos lo que decía Julio Martínez minutos después de reconocer su derrota el 5J: «Hemos asistido a una de las elecciones más fraudulentas en la historia, en cuanto a su concepción, al sistema de colectoras; han realizado una ingeniería electoral utilizando muchísima gente para juntar votos que no tenían». Resulta paradójico que ahora Martínez sea preso de sus propias palabras: será FCR el que en las PASO utilice esa ‘perversa ingeniería electoral’ para lograr que muchos riojanos voten a Olivares sin ni siquiera conocerlo.
Amén del dolor partidario y sentimental que tendrá que soportar el ‘correligionario’ riojano de ver a un a su candidato junto a José Manuel De la Sota, que representa al peronismo más ortodoxo y cuestionado por el radicalismo; resulta difícil de explicar por qué Olivares va con tres frentes distintos.
Ver que Massa critica públicamente a Macri, y este a su vez se despega de Massa; o que De la Sota aniquila a Macri, nombrándolo en sus Spot, o escuchar a Margarita Stolbizer despotricando contra Macri, Massa y De la Sota; y luego observar que a ‘todos ellos’ acompaña Héctor Olivares evidencia –al menos- contradicciones políticas sustanciales. Solo teniendo en cuenta los ‘acuerdos financieros’ de FCR con las fuerzas nacionales (Macri y Massa sobre todo) puede entenderse la desatinada situación de la oposición riojana.
Habrá que esperar los resultados electorales de Agosto y Octubre para saber si la ‘estrategia’ de Fuerza Cívica Riojana da sus frutos; si logra retener la banca que ostenta actualmente o incluso consigue otra banca más, el éxito de la estrategia será indiscutible. Así mismo, en el análisis previo ya podemos aseverar que la UCR riojana perdió el único valor que forjó en los últimos años y le quedaba tras la derrota en Julio: los principios, la ética y la coherencia política.