Por falta de costumbre al trabajo, por inutilidad o simplemente porque la infraestructura no está en condiciones. Esas fueron algunas de las excusas que dieron los empleados del Concejo Deliberante de la ciudad de Chamical, al ser consultados sobre la veracidad de la noticia.
Es que, resulta más que insólito lo sucedido en una de las oficinas del recinto deliberativo chamicalente, cuando un edil se quedó encerrado en ella, debiendo realizar toda una odisea durante varias horas para poder salir del lugar.
Según lo relatado por algunos testigos presenciales, todo sucedió cuando después de la sesión ordinaria, (punto más que extraño ya que no se reunían a trabajar desde el mes de julio) el concejal Juan Ángel Tello se dirigió a su oficina como habitualmente lo hace, pero la situación se agravó cuando al querer retirarse la puerta del lugar se trabó impidiéndole salir de la habitación.
Entre, gritos, patadas a la puerta, llanto y hasta un pedido desesperado de auxilio así el concejal aguardó por horas su salida del lugar.