Uno se aproxima hacia un triunfo amplio. Casi sin precedentes. El otro respira aliviado: tras un duro trajín, luego del sofocón que significaron las elecciones primarias, se abraza a una derrota digna. Se trata de Sergio Massa y Martín Insaurralde, a quienes a diez días para las legislativas los números les hicieron un guiño. La última encuesta en la provincia de Buenos Aires revela que el líder del Frente Renovador trepará por encima del piso implícito del 40% que se había trazado desde su equipo tras las PASO; y muestra al candidato K mejorando significativamente su desempeño respecto a agosto y superando, incluso, el 32% que ostentó el binomio Néstor Kirchner-Daniel Scioli en 2009. Para el intendente de Lomas de Zamora, además, hay otro dato alentador: respecto a la última medición, recortó en más de tres puntos la diferencia con su par de Tigre.
Según un informe de Managment & Fit -la encuestadora que adelantó el resultado de las PASO- tras consultar a 800 bonaerenses de forma telefónica y presencial entre el 11 y el 17 de octubre, la fórmula que encabeza Massa cosecharía el 40.5% de los votos. Mientras Insaurralde reuniría casi ocho puntos menos: el 33.3%. La distancia se acorta medio punto más si no se tienen en cuenta los indecisos.
Dos semanas atrás, en el muestreo anterior de la misma consultora, el intendente de Tigre conseguía casi doce puntos de ventaja: 43,2% frente a 31,5%.
De cualquier forma, ambos saben que la pulseada no es directa entre ellos, sino por sumar la mayor cantidad de votos posible para incorporar más diputados en diciembre. Ambos lo estarían logrando, en relación a las PASO, cuando el tigrense cosechó el 34,95% y el kirchnerista el 29,6%.
Los últimos sondeos también le arrojaron tranquilidad a Margarita Stolbizer. La candidata del Frente Progresista Cívico y Social parece haber evitado la fuga de su electorado, ante el “voto útil” contra el Gobierno. El 100 por ciento de sus votantes de las PASO promete volver a votarla. De este modo, se afirma en el tercer lugar con el 12,9%, un punto y medio más que hace quince días.
Por su parte, Francisco de Narváez, de Unidos por la Libertad y el Trabajo, se cortó definitivamente en la lucha por el cuarto puesto con Néstor Pitrola (FIT) y se acerca al 10%. Sexto, expectante, se ubica Gerónimo “Momo” Venegas (FE).
Sin pasos en falso de Massa y una caída brusca del resto de los candidatos, la mejoría de Insaurralde parece no obedecer a un solo motivo. Por un lado, el intendente de Lomas de Zamora elevó su perfil y logró despegarse de Cristina. A la vez, unió su imagen a la figura de Daniel Scioli, no sólo en los actos, sino también en lo estilístico: la agencia que le armó los spots usó el mismo formato que había utilizado para la campaña del gobernador en 2011. El “asesoramiento sciolista” también se reflejó en la manera con la que Insaurralde buscó salir de la encerrona a la que lo expuso Juan Cabandié en el escándalo por las amenazas a la agente de tránsito.
No obstante, más allá del empeño que puso Insaurralde por distanciarse durante este tramo de la campaña, los problemas de salud de la Presidenta parecen haber impactado en esta encuesta, no sólo porque generó una brusca caída en el nivel de desaprobación de la gestión de Cristina: entre los consultados, el 41% manifestó su deseo de que el kirchnerismo gane las próximas legislativas, frente al 32% consultado hace quince días.
Insaurralde también parece no haber cargado con la mochila de que Boudou se haya hecho cargo del Ejecutivo. En esta cuestión acaso haya influido la decisión de quitar al vice, que es resistido por el 70% de los encuestados, de los actos de campaña.
La clave en esta recuperación de Insaurralde bien puede buscarse en una distribución más heterogénea del electorado en el interior provincial, a diferencia del muestreo anterior. Si bien respecto a la encuesta anterior, Insaurralde apenas subió un punto (de 27,5 a 28,5 %), Massa perdió casi cuatro puntos (de 40,7 a 36,8) en el interior, pese a que desembarcó en casi todos los territorios que le fueron adversos en las PASO. Stolbizer parece ser la gran responsable en este aspecto: creció al 17 por ciento de intención de votos allí.
En cambio, en el Gran Buenos Aires los cálculos favorecen a Massa. Con Stolbizer muy abajo (10,4%), el tigrense obtiene un número levemente mayor de adhesión en relación a la última encuesta y araña los 43 puntos. Insaurralde, mantiene el 36%.
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