“La especie Franciscana, como otros delfines, no puede permanecer mucho tiempo fuera del agua. Tiene una piel muy gruesa y grasosa que le proporciona calor, por lo que la intemperie rápidamente le provoca deshidratación y muerte
Otro turista, identificado como Hernán Coria, retrató toda la secuencia: desde el momento en el que es sacado del agua, hasta la postal final con su cuerpo en la arena.
“La especie Franciscana, como otros delfines, no puede permanecer mucho tiempo fuera del agua. Tiene una piel muy gruesa y grasosa que le proporciona calor, por lo que la intemperie rápidamente le provoca deshidratación y muerte”, explicaron desde la Fundación Vida Silvestre en un comunicado.
El pequeño delfín pertenece a una especie que habita sólo las costas de Brasil, Uruguay y Argentina. Se estima que su población en el país es de 30 mil habitantes. “La ocasión sirve para informar a la población sobre la necesidad urgente de devolverlos al mar. Es fundamental que las personas ayuden al rescate de estos animales”.