Redacción de RiojaLibre
No es ningún secreto que Pichi Solorza –Secretario de prensa de la Gobernación y ‘mamo derecha’ de Luis Beder Herrera- digita los movimientos de muchos medios de comunicación en nuestra Provincia. Desde hace unos años, el Gobierno decidió ‘abrir el chorro’ publicitario para tres medios, discriminando abiertamente a los restantes. Con El Independiente (Gráfica), Canal 9 (TV) y Fénix (Radio), Pichi tenía ‘bajo control’ la difusión de las noticias que pretende insertar en la sociedad, y el dominio del ‘relato’ bederista.
Todas las problemáticas que perjudican al Gobierno Provincial no tienen –ni tendrán- espacio en esos medios; eso es ley. ¿Qué no se difundan significa que no existen? Claro que no, pero sí es cierto que el impacto no es el mismo. Con El Independiente, Canal 9 y Fénix, Pichi se aseguraba que el relato oficial sea dogma en La Rioja; la creación de una realidad paralela (en la que los problemas no existen) funcionaba a la perfección.
Pero el 11 de Agosto marcó un punto de Inflexión en este sentido. Sería necio negar que esa estrategia le resultó -con creces- al Bederismo desde su arribo al poder; pero las últimas PASO indicaron el final de ese escenario. Con los tres medios más importantes de la Provincia jugando deliberadamente a favor del Gobierno, el oficialismo sufrió una derrota histórica.
“Doctor, guarda con Mashasha que viene creciendo”, “El Gitano va a jugar fuerte a favor de FCR”, “Según ARESCO, Yoma no mide y está lejos”, “No podemos asegurarle que gana Tere”; todas esas advertencias llegaban –antes del 11-A- al despacho del Gobernador, con Pichi sentado a su lado. ¿Cuál fue la solución? “Poné en El Mirador que vamos 20 puntos arriba y que el Negro está bien posicionado amenazando a Julio”, fue la orden con una asombrosa tranquilidad ante un escenario no tan promisorio.
Sucede que el poder de los medios de comunicación es cada vez mayor; no descubrimos nada con ello y el Gobernador lo sabe mejor que nadie. Pareciera no existir encuestas que valgan, resultaba imposible perder con los medios a favor. La frase “Si el Mirador lo dice, es así” era una insignia en La Rioja, incluso para los opositores. Para corroborar dicha afirmación, vale destacar una anécdota que llegó a la redacción de RiojaLibre: Con sondeos en mano que le daban una ventaja de cinco puntos a su favor, Martínez se mostraba inseguro en las horas previas a las PASO. “¿Qué pasa Julio? Dicen (las encuestas) que ganamos”, le dio fuerzas un asesor; a lo que el Diputado contestó: “No se, no viste lo que dice el Mirador del último domingo”.
Le guste a algunos y le disguste a otros, El Independiente ha marcado tendencia y generado opinión como ningún otro medio en La Rioja. La agenda era sencilla de percibir: planteo del tema en El Mirador, y el lunes ya lo toman Fénix y Canal 9; imposible que la Provincia entera no hable de ‘eso’ durante toda la semana.
Ahí encontramos la explicación a la exagerada tranquilidad que ostentaba el Gobernador en los días previos a las PASO. Era Imposible, no había ninguna posibilidad… “¿Leíste a Martínez en El Independiente? ¿Lo viste en Canal 9? ¿Lo escuchaste en Fénix?… ¿Cómo nos va a ganar entonces?”. De ninguna manera justificamos tal nivel de soberbia, pero se debe reconocer que esa fórmula funcionó infaliblemente en los últimos años.
Es por este planteo que a la hora de buscar responsable, el Gobernador NO se enfoca principalmente en los candidatos. En la cabeza del Doctor, los verdaderos responsables de la primera derrota del peronismo en la Provincia, hay que buscarlos en las redacciones y estudios audiovisuales. Y si… le vendieron un ‘diario de Irigoyen al cuadrado’ y se topó con un papelón histórico.
Luego del 11-A, más allá de todas los vericuetos políticos que influyeron en el comicio, al Doctor le quedó algo muy claro: Ya no se puede confiar, El Independiente ya no es lo que era… Habrá que ‘laburar en serio’, será necesario redoblar los esfuerzos.
El ‘por qué’ quedará para otro artículo y será necesario un exhaustivo análisis para su correcta interpretación; no es nada sencillo descubrir las causas por las que un imperio pierde su poder. Sin embargo, podemos adelantar que ‘El Fama no se Toca’ tuvo mucho que ver. Se trató de un reclamo que traspasó todo tipo de fronteras (incluidas las comunicacionales) y no le hizo falta la ‘ayuda’ de los medios masivos para su éxito.