Redacción de RiojaLibre
Hace tiempo que la ola inseguridad que vive La Rioja dejó de ser una sensación para convertirse en una realidad palpable cotidianamente. La Droga invadió nuestra Provincia y se apoderó de los jóvenes, que fin de semana a fin de semana protagonizan grescas barriales con resultados fatales.
Hasta hace unos meses, los lunes había que informar los ‘muertos en las rutas riojanas’. A pesar de algunas críticas recibidas, el Decreto 840 hizo lo suyo y las víctimas fatales por accidentes viales mermaron considerablemente. Pero ahora ocupan tapas y titulares las ‘muertes por grescas barriales’, cuyo elemento constante es el mismo: drogas.
Además, allanamientos con ‘históricas’ cantidades de Drogas que llegan a la Provincia. Especialistas aseguran que La Rioja dejó de ser un lugar de Tránsito, las cocinas de drogas ya se instalaron en la Provincia. Ante este oscuro panorama, no es en el Ministro de Gobierno (Claudio Sául) en el que reposan las miradas inquisidoras, sino en el Secretario de Seguridad Luis Angulo. Cuando se creó la Secretaría para que Angulo vuelva al Gobierno, se le dio todo el poder para manejar fondos y recursos con el fin de combatir la inseguridad.
‘Luisito falló, algo va a haber que hacer’, habría soltado el Gobernador hace unos días a su entrono más cercano. ‘Luisito’ no es otro que Luis Angulo, con quien Beder tiene un aprecio especial, ya que fue el primero en pasarse a ‘su bando’ cuando ‘sacó’ del poder a Ángel Maza. Sin embargo, la realidad política y social demanda un cambio, y el Gobernador está dispuesto a concretarlo: Angulo tiene los días contados.
EL OBISMO MARCELO COLOMBO PIDE PREVENCIÓN
Semanas atras se conoció el secuestro de unos 50 kilos de droga (cocaína y marihuana) en la Capital provincial. El último fin de semana, hubo que lamentar el asesinato a puñaladas de un joven de 22 años en el barrio San Martín.
Ante este tipo de situaciones, el obispo riojano Marcelo Colombo encendió el alerta y sostuvo con preocupación que la droga “es un monstruo que le va ganando el corazón a nuestros chicos”.
Pero luego Colombo fue más allá y le reclamó al gobierno y la policía “buscar a los responsables y llevar adelante una política más preventiva” para prevenir la venta de estupefacientes.