Redacción de RiojaLibre
Un perfil falso en Facebook o Twitter (denominado Troll) sirve -y mucho- para incrementar el porcentaje de una encuesta en una red social. Ante la aparición de una Pregunta en las redes (la gran mayoría de las veces operada por quien se quiere posicionar), se copia el ‘link’ de la encuesta, se lo envía al ‘comunity manager’ contratado, e inmediatamente el porcentaje comienza a subir.
El problema -y eso lo saben muy bien en Casa de las Tejas- es que el 27 de Octubre, cuando haya que ir al cuarto oscuro a votar, los Comunity Manager no podrán transportar sus miles de Fakes para meter la boleta en el sobre.
Ante la reiterada pregunta ‘¿Quién debe ser el candidato a Gobernador?’, que se repite día a día en las redes sociales, en Casa de Gobierno saben que no gana quien más respaldo popular tiene, sino quien más plata haya invertido en las redes sociales. El riojano que padece los tarifazos, al que no le alcanza la Quincenita para pagar las Boletas de los Servicios Públicos, el riojano que recibe un telegrama de despido, lo último que hace es estar pendiente de una encuesta en las Redes Sociales.
La ‘presencia en las redes’ quizás sea un mal necesario, pero de ninguna manera es suficiente. Aquel dirigente que ‘descanse tranquilo’ porque ve como sus Fakes lo hacen ganar las encuestas twitteras, bien lejos está de tener chances reales de ser candidato a Gobernador.