La concejal de Capital, Alcira Brizuela, insistió con la necesidad de avanzar con la decisión de dictar la emergencia comercial en la ciudad, por el fuerte impacto que genera la crisis en el sector y que ya se torna insostenible.
En este sentido, se volvió a concretar una reunión en el Centro Comercial e Industrial, donde la edil fue recibida por las autoridades encabezadas por su presidenta, Irma Dueñas. Allí pudieron escucharse las diferentes inquietudes, que sirven para enriquecer el proyecto de ordenanza que pretende declarar la emergencia comercial en el ámbito de la Capital.

El impacto de la crisis económica y financiera es fácilmente palpable y se refleja en los números que posee el CCI, respecto a la caída de ventas que representa entre el 40% y el 50% interanual.
“Sin ir más lejos, esta semana nos dimos con la portada del principal diario de La Rioja, donde se plantea la cantidad de locales comerciales desocupados, producto de la escasa o nula inversión de los emprendedores”, expresó Brizuela al término de este nuevo encuentro para enriquecer el proyecto de ordenanza.
También tuvo una reunión con la comisión de Hacienda del Concejo Deliberante, para avanzar en la elaboración y consenso del proyecto que “ya es de absoluta necesidad y prioridad, si queremos salvaguardar a un sector que brinda miles de puestos de trabajo, hoy en riesgo por las políticas anticompetitivas de la Nación”.
La iniciativa prevé reducir un 50% las tasas impositivas municipales, y un 50% las multas o infracciones que puedan llegar a tener los pequeños y medianos comercios. “Sería por un término de seis meses, con la posibilidad de prorrogarlo seis meses más, según como avance la situación económica”, expresó.
La concejal se mostró optimista en que el proyecto avance su curso en las comisiones respectivas y pueda darse el tratamiento óptimo en el recinto, porque “de una vez por todas debemos velar por los intereses de nuestra gente, en lugar de andarse peleando por meros intereses políticos sectoriales”.

