1 – “Ratoneanos un poco”, muchas mujeres afirman que no los hombres se apuran demasiado y eso rompe un poco el clima. “Probá un poco en cada punto hasta que encuentres el que nos vuelve locas, quedate un ratito ahí y probá después en otro lado”.
2 – “No te concentres sólo en el arco”, a veces estamos tan concentrados en lo que nos pasa a nosotros que nos olvidamos de darle placer a ella. “Tomate tu tiempo y seguro la vamos a pasar mucho mejor”, afirman la mayoría de ellas.
3 – “Que hayas acabado no significa que se terminó todo”, es casi una cuestión fisiológica, a ellas no le pasa lo mismo, la mujer puede acabar 20 veces y quizás siga teniendo ganas. Si notás que ella no llegó y te está sugiriendo seguir, portate y dale un rato más, total… no la vas a pasar mal.
4 – “A nosotras también nos calientan tus sonidos, tus palabras”, si a vos te calienta que ella se ponga como loca y grite, bueno, a ella también. Tirale una que otro comentario medio pervertido (no te zarpes) y vas a ver que eso garpa.
5 – “¿Sexo anal?, despacito, ¡con lubricante!”, si nos ponemos técnicos y esto lo amerita, la vagina tiene lubricación natural, el ano no. Al menos que a ella le guste el dolor (para nada la mayoría de las mujeres), conseguí un lubricante, hacelo despacio, ella te lo va a agradecer.
6 – “No te rías de todo en la cama”, a veces nos tentamos con algún ruido y debemos parecer un nene que ve algo gracioso en la calle. Incluso si a ella eso le parece tierno, el sexo no es un terreno para la ternura, quizás un poquito al principio, pero el exceso de bobadas en la cama puede tener efectos contraproducentes.
Ir derecho ahí es un error
7 – “En el calentamiento no te vayas derecho al clítoris”, es un error muy común, el hombre se va derecho a eso como si fuese el “cáliz sagrado para calentar a una mujer”. Error, toda la zona alrededor es muy sensible, los muslos también, arrancá desde afuera hacia adentro, lento, como cuando estás disfrutando de un buen plato.
8 – “Actuá como si te importara lo que está pasando”, quizás la “movida” arrancó como un embole, pero es de machos ponerle onda, así que arremangate y dale que no hay polvo que no se pueda salvar. Si le ponés onda a ese picado que viene 0-8, ¿vas a dejar de ponerle onda a un polvo? ¡Aguante macho!
9 – “Odio que me meta los dedos, entrando y saliendo rápido”, si ellas quieren que las penetres, van a quererlo con tu pene. Es algo que tenés que tener en cuenta si no la querés pasar mal.
¡Nalgueame y decime Marta!
10 – “Chateanos, si te lo pedimos, no te ahorres cachetazos en las nalgas, si nos gusta, nos vuelve locas”, claro que la comunicación es clave en esto, no arranques así si ella no te lo pidió, pero si es algo que le genera placer, “metele que son pasteles”.
11 – “Para nosotras pasarla bien es una cuestión física y emocional”, más claro tirale agua… no te concentres sólo en acariciarla y comerla toda, sino que también ratoneale la cabeza y te va a responder como nunca antes.
12 – “Mirame a los ojos cuando la posición lo permita”, para las mujeres es clave que mantengas contacto visual siempre que puedas. A ellas las calienta de sobremanera y eso siempre se traduce en un mejor polvo para vos, ¿por qué no hacerlo?
13 – “Es el clítoris, no el timbre de una casa”, hay hombres que imitando lo que ven en el porno le dan al clítoris como si fuese un control de la Play. No… error, suave, con calma, movimientos circulares suaves, sin demasiada presión, cambiá de arriba a abajo… esas son las claves.
14 – “Los pezones no son la única zona sensible de los pechos”, no te concentrés sólo ahí, pensá que las tetas están llenas de zonas erógenas, agarralos desde los costados, nunca presiones demasiado porque duelen, frotalos en distintas formas, placer automático.
15 – “Si me gusta el sexo duro, no te preocupes, no me voy a romper”, si ella te lo pide, dale como si fuese el fin del mundo. No escatimes en velocidad, mordela un poco en los trapecios, pasale la lengua por todas partes, se va a volver loca.
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