Soy postulante a la escuela de agentes de la policía. Por empezar nos pedían $200 pesos para la inscripción más los $2000 en estudios médicos a los que debíamos si o si hacerlos en sanidad de la policía. Una vez con todos los aptos podíamos ir a la escuela a pedir el papel que nos permitía rendir las cuatro materias del cursillo, más el examen físico. El día que fuimos a rendir los exámenes escritos nos pedían $1 por examen quien no tenía ese peso no rendía. Una vez rendidas las cuatro materias pasamos al examen físico el cual contaba con varios obstáculos.
Ese día el comisario mayor Pereyra nos dice que se nos iba a notificar antes del Chayero Sanagasteño, al ver que no pasaba nada nos dirigimos a la escuela donde nos dicen que no hay novedades, que volvamos antes de la Chaya y cuando vamos nos dicen que no, que no estaba que vamos después de la Chaya.
Cuando nos inscribimos la carrera era de un año, después del tema Romina Ríos se cambió la modalidad a dos años, cabe destacar que el viernes 20 de febrero hasta las 11 de la mañana había una lista “supuestamente” con los chicos que tenían las mejores notas y por temas de horarios nos dicen y piden que volvamos a las 14 horas, cuando vamos nos dicen que por orden del Ministro Saúl, las listas se modificaban y que no nos podían dar información hasta las 19 horas, mientras los 2700 esperábamos en la puerta, sale un cadete y nos dice que de los 2700 iban a entrar solo 180 30 mujeres para agentes y 150 masculinos. Fueron pasando las horas la lista no aparecía nadie, nos mandaban a algunos a casa de gobierno. Cuando volvemos nos dan la noticia que a las 21 o 22 horas nos iban a dar la lista.
Eran las 23 horas bajo la lluvia y seguíamos esperando, sale el mismo cadete y nos dice que se iba a dar la lista el día sábado a las 8 de la mañana. La mañana del sábado acudimos y nos dicen que el lunes compremos la ropa por las dudas que ingresemos y estemos en la lista.
Una falta total de respeto, cuando nos dijeron el cupo de femeninas y masculinos que entraban, nos decepcionamos porque nos habían dicho que quedarían más aspirantes y ahora entre tantas listas, idas y venidas, se acomodó solo a la gente que tiene poder político y policial. Una vergüenza que nos cambie el cupo cuando hemos hecho de todo para conseguir la plata.
A muchas de las femeninas que entraron, jamás les vimos las caras en el examen físico, esto es un acomodo tremendo. Por parte del comisario Mayor Pereyra, nos dicen que seria, quien le mandaba a las chicas preguntas de los que iban a ser los exámenes y les pedía supuestamente a cambio fotos.
Todos los aspirantes queremos la solución o la devolución del dinero. Los problemas vienen cuando elijen gente con el dedo y no a los que realmente queremos entrar, a la gente del interior también los tienen a las vueltas, nos preguntamos por qué nos hacen pagar una fortuna en estudios psicofísicos, que terminan sin servir para nada, cuando se podría realizar en los hospitales públicos…
Es increíble ver como la interna del poder esta descontrolada, sin planificación, sin argumentos profesionales y bajo la presión del riojano común que reclama justicia en la calles y más ahora con la muerte de Romina.
El gobernador sigue sin responder, ni siquiera se sabe si dio y cuando las condolencias a la familia de la joven, poco importara después de las declaraciones respecto a lo que piensa de los riojanos y su permanente forma de actuar.
Todos los funcionarios del gobierno están ocultos y sabiendo que tienen responsabilidad política, sin embargo siguen gastándo la plata de los riojanos de manera inescrupulosa y sin rendir cuenta o al menos responder, de dónde sacan la plata para la campaña vergonzosa y vacía que llevan a delante…