«Quiero lograr algo sincero con el alma, a mí no me gusta el puter… Pero necesito exposición. Disfruto la cámara. Hago fotos y me siento viva, vuelvo a nacer. Y si después se da la actuación, sería genial», dijo Annalisa en una entrevista con la revista Paparazzi, sobre su trabajo.
Y no anduvo con vueltas sobre la farándula. «Con Vicky fue todo un juego. Pero si ella fuera una mina más abierta, quizás pasaría algo, porque me parece atractiva. Quizá haría un trío, pero con mi pareja y una mujer. Sigo enganchada con un pibe que está de novio… Ojalá tuviera una vida sexual como la gente se imagina que tengo. Lo lindo es que pasó tanto desde la última vez, que siento como que volví a ser virgen», tiró.
Y realizó un breve recuerdo sobre su infancia: «Cuando llegué a la Argentina desde Italia, hace cinco años, empecé con problemas alimentarios: anorexia y bulimia. Me la pasaba con el centímetro y las cremas, el espejo era mi enemigo. Me hice los tatuajes cuando me empecé a mandar todas las cagadas, pero me arrepiento porque me da medio ‘groncho’. Ahora ya estoy más centrada», tiró.
Además, realizó una producción fotográfica muy hot. Mirá las imágenes en la galería.
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