Redacción de RiojaLibre
El único fin en el Paseo Cultural, ex Escuela Normal, es ‘hacer negocios’ (firmando contratos que exceden el 10 de Diciembre), perdiendo todo tipo de respeto por una de las instituciones más importantes de la Provincia.
Lo más preocupante, es que ningún área de Gobierno ni funcionario (la UECC depende de la Secretaría de la Gobernación) se digna a ir al Paseo Cultural, a controlar y ponerle freno al desmanejo que se hace evidente.
En un principio, se tenía pensado destinar un aula sola para ‘el Comercio’, pero luego agarraron tres. La exageración para lo Comercial no tiene límites: la Cultura pierde terreno día a día en el Paseo Cultural.
La controversia se hace presente en cada uno de los ciudadanos/clientes. Entrar a Medialunas Calentitas, y pensar que allí Rosario Vera Peñaloza fundó en 1898 el primer jardín de infantes de la Argentina, y todos los días daba clases; hace difícil disfrutar con plenitud la Merienda o el Desayuno.

Sin respetar la arquitectura del lugar, que es pura historia riojana, los nuevos ‘comercios ambulantes’ llenan de construcciones livianas la ex Escuela Normal. Durlock por todos lados se ve en los históricos pasillos y aulas del Edificio.


El descontrol llega a poner en peligro las condiciones básicas de los trabajadores. Así, se observan instalaciones eléctricas precarias, con la peligrosidad que ello implica. Vale recordar que en el lugar ya falleció un trabajador por la manipulación de la electricidad. Ante cada lluvia, las goteras y filtraciones son moneda corriente, haciendo un combo mortal con las irregularidades en materia de electricidad. La Seguridad brilla por su ausencia en esta materia.


Otro punto para tener en cuenta, metiéndonos de lleno en el ‘ámbito comercial’, es la falta de criterio para dividir los espacios. Con el afán de ‘llenar’ de Carros las veredas, el sector dedicado a los juegos infantiles queda rodeado de Patios Cerveceros. Es así que las madres que llevan a sus hijos al Paseo, deben cruzarse con varios ‘jóvenes’ tomando sin límite alguno.
Pobre Rosarito: el Carrito Rosa, la última gran incorporación del ‘Paseo Cultural’-
La desidia que hay por la ex Escuela Normal es evidente. Quizás el hecho de que sea un Sanjuanino (que no sienta como riojano lo que significa esa Institución) quien comande el lugar, tenga algo que ver. Lo curioso es que desde el Gobierno Provincial se permita este avasallamiento a la cultura riojana.
En el Paseo Cultural ya no hay Cultura, ya no hay eventos culturales; en el Paseo Cultural abundan las Cervecerías, comida, helados y medialunas.
Quien pase hoy por Bazán y Bustos y Catamarca, verá que el nombre del lugar está totalmente equivocado. Lo que allí se ve no es un Paseo Cultural, lo que allí habita es un Paseo Comercial. El Comercio le ganó a la Cultura, sin ningún respeto por la historia.


